El nuevo Audi TT ya se encuentra en Chile
<p>Es el deportivo que abrió una nueva era en Audi. El TT, desde su nacimiento en 1988, suma adeptos gracias a un diseño que marcó un antes y un después para este tipo de vehículos. Ahora, con su tercera generación, exhibe nuevamente los avances que pronto se apreciarán en otros modelos de la marca. De líneas […]</p>
Es el deportivo que abrió una nueva era en Audi. El TT, desde su nacimiento en 1988, suma adeptos gracias a un diseño que marcó un antes y un después para este tipo de vehículos. Ahora, con su tercera generación, exhibe nuevamente los avances que pronto se apreciarán en otros modelos de la marca.
De líneas más agresivas que la versión anterior, aunque manteniendo el genotipo coupé que lo hace claramente identificable, el nuevo TT arriba con un motor 2.0 TFSI de inyección forzada de cuatro cilindros que desarrolla 230 caballos de fuerza y con el que pasa de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos. Su valor es de $33.600.000, se espera vender 70 unidades al año y entre los avances destaca el peso en vació de solo 1.230 kilogramos, lo que es casi 50 kilogramos menos que su predecesor.
La transmisión que incorpora es la S Tronic de doble embrague y seis velocidades que en modo manual puede ser controlado a través de funciones en el volante. Para favorecer el rendimiento y la eficiencia del sistema, la caja dispone del "Audi drive select", que pone automáticamente la transmisión en punto muerto cuando el conductor saca el pie del acelerador. Para incrementar la eficiencia, también cuenta de serie con "Start – Stop".
En el interior las modificaciones apuntan a la ergonomía del conductor. Visto desde arriba, el panel de instrumentos tiene la forma de un ala de avión, mientras las salidas de aire acondicionado redondas son como turbinas de avión.
Las salidas de aire ganan relevancia. En ellas están los controles para el sistema de aire acondicionado automático, mientras los controles para los asientos calefaccionados (opcionales), el modo de recirculación de aire, temperatura, distribución de flujo de aire y la fuerza de flujo de aire están situados en los ejes.
Pero quizás lo más atractivo es el nuevo sistema electrónico ubicado en el tablero. Se trata del Audi Virtual Cockpit y es un instrumento digital que cuenta con gráficas versátiles y detalladas que toman el lugar de los instrumentos análogos y el monitor MMI en el nuevo TT.
De esta forma, el conductor puede elegir en la pantalla totalmente digital de 12,3 pulgadas entre dos modos de vista diferente, con el velocímetro y el tacómetro en primer plano o en modo Infotainment con el mapa de navegación (opcional) al frente y las funciones antes mencionadas son mostradas más pequeñas.
ACTUALIZACIÓN EJECUTIVA
El nuevo TT de Audi se presentó con las actualizaciones del A6 ($33.100.000) y el A7 Sportback ($53.220.000), modelos que llegan altamente equipados tanto en confort como seguridad.
El A6 es sobre quien se depositan mayores esperanzas, debido al segmento más amplio al que ingresa. El objetivo es colocar 160 unidades y para eso ofrecerá como renovación los cambios hechos a la grilla "singleframe", con los grupos ópticos, entradas de aire, parachoques, faldones laterales, luces traseras y salidas de escape, mientras como opcional están los faros con tecnologías LED o Matrix LED, combinadas con luces de viraje dinámicas.
A nivel motriz luce una gran modificación, pues ahora dispone del motor 1.8 TFSI (en lugar del anterior 2.0) que desarrolla 190 caballos de fuerza, unido a un rediseñado sistema de transmisión manual de seis velocidades S tronic de siete velocidades que reemplaza al anterior Multitronic.
El A7 Sporyback, por su parte, es un vehículo más de nicho, y en la marca esperan colocar 50 unidades al año. Luce también la renovación de la parrilla singleframe, los parachoques, tubos de escape y faros, además de tecnología LED que es estándar.
Se mueve por un motor de 3.0 litros y 333 Hp, potencia que le permite pasar de 0 a 100 km/h en 5,3 segundos, aunque su objetivo es un andar cómodo, suave y confortable, lo que se consigue gracias a la configuración del chasis y la suspensión.
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