El preparador inglés Litchfield le da una vuelta de tuerca al Alpine A110 para hacerlo más radical

Desde su renacimiento en 2017, el Alpine A110 no ha pasado desapercibido en Europa. El sucesor del coupé francés de los 70 y 80 incluso está entre los siete finalistas a Auto del Año en Europa, sitial que comparte junto a otros reputados modelos de la industria. El deportivo galo monta un motor 1.8 litros turbo (el mismo del Renault Megane RS lanzado hace unas semanas en Chile), el que ahora recibe nuevos aditivos opcionales por parte del preparador británico Litchfield. ¿El resultado? Un Alpine con 320 caballos (+70 Hp).

Trabajo en dos etapas

Los ingenieros ingleses han desarrollado su labor en dos pasos. La primera consiste en una preparación de una nueva gestión electrónica del motor, de manera que este avance hasta los 300 caballos y a un par motor máximo de 386 Nm. Asimismo, la empresa subraya que la respuesta al acelerador es más eficaz, gracias a una notable mejora del turbo.

En la segunda etapa, Litchfield dice que el tracción trasera llega a los 320 caballos, mejora que se logra con un sistema de escapes de fabricación propia, además de la posibilidad de sumar un kit de suspensión o un diferencial autoblocante.

Por ahora, la empresa comercializa la etapa 1 de 300 caballos y pronto lo hará en la opción más radical de 320 Hp. Hasta la etapa 1, el auto logra una relación peso-potencia de 3,6 kilogramos por caballo. El valor fijado por la firma experta en tuning es de 995 libras esterlinas, algo así como $ 900 mil.