McLaren inicia la ruta electrificada con el nuevo deportivo Artura, pero, ojo, que también lleva un poderoso V6
El primer híbrido enchufable de gran producción de la marca británica alcanza los 100 km/h en tres segundos y puede viajar a un máximo de 330 km/h. Su precio libre de impuestos bordea los $ 185 millones.
McLaren ya avisó en octubre: sepultaba su división Sports Series para darle la bienvenida a la nueva camada High Performance Hybrid (HPH). Era su muestra fehaciente de que iniciaba la transición eléctrica, un giro que desde este miércoles tiene a su primer exponente de serie: el McLaren Artura. El superdeportivo inglés es un híbrido enchufable impulsado por un motor térmico V6 y otro eléctrico ubicado en la caja de cambios, y que permite una autonomía máxima de 30 km en ciclo totalmente silencioso.
Siguiendo en el apartado motriz, el McLaren Artura -un bólido de tracción trasera, como los deportivos más puros, e híbrido enchufable, como el Mclaren P1 y el Speedtail- lleva en el eje trasero el citado motor V6 de 3.0 litros asistido por dos turbos. Este propulsor le confiere 585 caballos (y 720 Nm) que se conjugan con la fuerza más contenida que aporta el bloque ecológico: 95 Hp. Al estar conectado directamente con la transmisión, McLaren explica que este último motor es el encargado de mover al Artura cuando va marcha atrás. Los números de esta bestia inglesa responden bien al pedigrí y la historia de la firma de Woking: ostenta un 0 a 100 km/h de 3,0 segundos, un 0 a 200 km/h de 8,3 segundos y un 0 a 300 km/h de 21,5 segundos. La velocidad máxima, por su parte, está limitada a 330 km/h.
El McLaren Artura requiere de una conexión mínima de 2,5 horas para alcanzar una carga del 80 de sus baterías de iones de litio con capacidad de 7,4 kWh. Uno de los puntos atractivos de este primer integrante de la familia High Performance Hybrid, tiene que ver con la capacidad de la energía eléctrica de volcarse completamente a la performance cuando el Artura está seteado en los modos Sport y Track. Como es sabido, los motores eléctricos no requieren de revoluciones para entregar el torque.
Pese a sus pilas de litio, el nuevo superdeportivo británico marca sobre la balanza 1.498 kilos, algo que, McLaren explica, se ha conseguido gracias a la reducción de hasta un 25% del ramal de cables. Hace meses el fabricante de Woking había informado que su última obra iría basada sobre la estructura McLaren Carbon Lightweight Architecture (MCLA), diseñada para albergar las nuevas mecánicas electrificadas junto con las tradicionales de combustión.
El McLaren Artura -sucesor natural del 570S- tiene un precio inicial de £ 185.500, es decir, $ 185 millones a lo que, de todos modos, habrá que sumar los impuestos.
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