Acusaciones de plagio contra Sánchez desatan un escándalo en España

Son momentos complejos para Pedro Sánchez en España, que el lunes cumplió sus primeros 100 días en el poder. Una ola de acusaciones en su contra por supuesto plagio a varios autores en su tesis doctoral, han provocado un escándalo de proporciones a pesar de las aclaraciones que debió dar el presidente del gobierno español.

El diario ABC y OKdiario pusieron al gobernante socialista en el ojo del huracán tras señalar que en su memoria presentada en 2012 en la universidad privada Camilo José Cela de Madrid y titulada "Innovaciones de la diplomacia económica española: análisis del sector público (2000-2012)", el político habría copiado párrafos de otros autores y de informes de gobierno.

Las reacciones no tardaron en aparecer, al tiempo que el propio Sánchez debió desmentir las acusaciones y aseguró que emprenderá acciones legales contra los responsables si no se produce una "rectificación".

En medio de la controversia y tras una serie de presiones, el jefe de gobierno español publicó una extensa declaración en su página de Facebook en la que se comprometió a facilitar el acceso a su memoria haciéndola pública durante la jornada de este viernes. "Por mucho que traten de desprestigiarme, me siento orgulloso de mi tesis universitaria. No ensuciarán lo que tanto esfuerzo me costó", apuntó.

Pero no fue suficiente. Y es que desde su defensa, la memoria de 342 páginas ha permanecido bajo siete llaves. Hasta ahora, solo está disponible bajo solicitud previa a la universidad y al propio autor, y no puede ser fotografiada ni fotocopiada.

Según la investigación periodística, entre los plagios figuran artículos de los economistas Julio Cerviño y Jaime Rivera, profesores de la Universidad Carlos III de Madrid, e informes del gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero (2004-2011), pertenecientes al Ministerio de Industria y realizados por su extitular Miguel Sebastián.

Pero no solo eso: Sánchez también está siendo apuntado por presunto "autoplagio", al haber replicado sin citas algunos pasajes de artículos propios, publicados meses antes en revistas.

En agosto pasado, el medio español Libertad Digital publicaba un artículo titulado "La larga lista de políticos que falsificaron sus estudios". En la nota aparecen mencionados dirigentes como Pablo Casado del Partido Popular; Cristina Cifuentes, expresidenta de la Comunidad de Madrid; Juan Carlos Monedero, exsecretario de proceso constituyente y programa de Podemos; Carles Puigdemont , expresidente de la Generalidad de Cataluña, y el mismo Pedro Sánchez.

La última en sumarse a esta nómina fue la ahora exministra de Salud, Consumo y Bienestar Social, Carmen Montón. La ministra socialista presentó su renuncia el martes, luego de que se le acusara de copiar 19 páginas de su proyecto de magister de Wikipedia y otras notas de la web.

Para el sociólogo y columnista de El País, Jorge Galindo, "todo esto se engloba en mala praxis académica", dijo a La Tercera. Según el experto, una de las razones por las que se produce este tipo de problemas es porque "muchos políticos en España necesitan, por alguna razón, tener títulos y esto los lleva a acudir a un mercado universitario para conseguir lo que buenamente puedan", agregó.

Y más todavía. Gran parte de las críticas se centran en que Casado, Montón y el mismo Sánchez, realizaron sus tesis de estudios mientras eran políticos, y tenían muy poco tiempo para sus máster o doctorados. Lo anterior, abre otra arista de la problemática sobre los estándares de calidad y exigencias de algunas casas de estudio.

Los cuestionamientos a las tesis no son novedad en España. En diciembre de 2015, el portal La Marea publicó una extensa investigación en la que no solo apuntaron a la tesis del actual jefe de gobierno y a las complicaciones que tuvieron para acceder a ella (peticiones que incluyeron al mismo PSOE), sino que también al libro de Sánchez La nueva diplomacia económica. publicado en 2013. Se da el caso que esta obra está basada en su tesis, la cual nunca es citada. En el libro, además, comparte autoría con Carlos Ocaña Obis y el extitular de Industria mencionado en los plagios, Miguel Sebastián.

El economista y escritor español, Daniel Lacalle, pone paños fríos sobre el escándalo. "Creo que no llevará a Sánchez a dimitir. Se puede criticar la calidad y autoría efectiva o la corrección a la hora de citar, pero de momento no parece que haya una ilegalidad", concluyó.