Elecciones en el País Vasco: PNV resiste avance del partido heredero de ETA y podrá reeditar coalición con los socialistas

Los ciudadanos del País Vasco decidían este domingo, en las elecciones regionales más disputadas de las últimas décadas, si el Partido Nacionalista Vasco (PNV) dejaba de ser la fuerza hegemónica de esa comunidad autónoma española en favor de EH Bildu -el partido heredero de ETA- y qué papel reservaban a las dos grandes fuerzas políticas nacionales, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y el Partido Popular (PP).

Finalmente, confirmando la igualdad que pronosticaban las encuestas, los resultados de las elecciones en el País Vasco –con el 100% escrutado– permitirán al PNV seguir gobernando con el apoyo –previsible– del PSOE. Ello, luego que los jeltzales obtuvieran 27 escaños, los mismos que los de EH Bildu, si bien los primeros lograron el 35,2% de los votos, contra el 32,5% de los abertzales. Respecto a las elecciones de 2020, el PNV perdió 4 escaños, mientras que EH Bildu ganó 6.

En tanto, el Partido Socialista de Euskadi-Euskadiko Ezkerra, que sube a 12 escaños (2 más que en 2020), con un 14,2% de los votos, conserva la llave del gobierno que en campaña prometió dar al PNV. El PP, con un 9,2% de los sufragios, sube un diputado hasta obtener 7 asientos, mientras que Vox mantiene el diputado que tiene en el Parlamento vasco. A su vez, Sumar entra con uno y Podemos, que en 2020 tenía seis asientos, se queda sin representación.

Estos resultados permitirán a la formación jeltzale reeditar la actual fórmula de gobierno con un PSE-EE al alza, lo que les permite sumar 39 escaños, uno más que la mayoría absoluta en la Cámara vasca, apunta Europa Press.

El candidato del PNV, Imanol Pradales, compareció eufórico tras conocer los resultados. “Hemos ganado las elecciones”, celebró. “Euskadi ha decidido y reivindicado cuál va a ser su futuro en plena libertad”, aseguró, destacando que los resultados muestran que “ha quedado clara la pluralidad” del País Vasco. “Esa realidad hay que respetarla y fomentarla”, afirmó.

Por su parte, el candidato de EH Bildu, Pello Otxandiano, destacó la performance de su formación, que pasa de 21 a 27 escaños. “Hemos obtenido unos resultados impresionantes. Pocas personas habrían imaginado hace cuatro años que hoy estaríamos aquí en estos resultados. Casi hemos aumentado en 100,000 votos la izquierda soberanista. Hemos conseguido seis escaños más y, a consecuencia de todo ello, el mapa político ha cambiado en los tres territorios”, celebró. “Estamos entrando en una nueva época”, vaticinó.

El Presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, felicitó al PNV por su victoria en las elecciones autonómicas de Euskadi. También al candidato de su partido, Eneko Andueza, “por el extraordinario resultado y la magnífica campaña”, según comentó en la red social X. “Los socialistas volvemos a ser decisivos en Euskadi. Seguiremos trabajando para mejorar la vida de la gente”, añadió.

En cambio, la secretaria general del Partido Popular, Cuca Gamarra, consideró que el resultado de EH Bildu en las elecciones vascas “es una mala noticia para España”. “No es una buena noticia que haya conseguido el resultado más alto de su historia”, afirmó Gamarra, quien achacó a Pedro Sánchez el resultado de la formación vasca. “Desde que Sánchez está en la Moncloa, Bildu no ha dejado de crecer”, enfatizó.

En estas elecciones, los partidos nacionalistas vascos, PNV y EH Bildu, rompieron su techo electoral de 52 parlamentarios al conseguir este domingo un total de 54 representantes. La fotografía de la nueva Cámara autonómica que ha salido elegida durante la jornada en las urnas será inédita, al convertirse en la más nacionalista de la historia.

Al respecto, el diario El País destacó la importancia de estos comicios. “Las elecciones vascas de la renovación generacional han confirmado la profundidad del cambio social de la Euskadi del posterrorismo en un clima, además, de normalidad y moderación entre sus representantes políticos frente a aquellas elecciones marcadas por la violencia política y la confrontación identitaria que partía en dos a Euskadi. El cambio social tiene raíces profundas y generacionales, como muestra el importante ascenso de EH Bildu que ha disputado la hegemonía al PNV hasta igualarle en escaños”, escribió Luis R. Aizpeolea.

Y agrega: “El cambio social no llega a consumarse en un cambio de ciclo, entendiéndolo como un vuelco en el gobierno vasco. Pero los nuevos gobernantes tendrán que responder como prioridad a la demanda social y atender también a una Euskadi con el Parlamento más nacionalista de la historia, pero también de menor reivindicación independentista y mayor exigencia social”.

En ese sentido, Europa Press destaca que este auge del nacionalismo en el País Vasco se produce en un momento en el que los abertzales parecen haber modulado más sus mensajes soberanistas, en favor de la gestión, cuando existe una preocupación especial de los vascos por los servicios públicos, sobre todo por Osakidetza (Servicio Vasco de Salud), hasta ahora “la joya de la corona”, que los ciudadanos consideran que ha quedado “herida de muerte” durante la pandemia.