Seis palestinos fallecen por disparos israelíes durante protestas en la Franja de Gaza
Cuatro de los fallecidos fueron alcanzados en uno de los cinco campamentos que se instalaron a lo largo de la frontera.
Seis palestinos murieron por disparos israelíes en una protesta cerca de la frontera que divide la Franja de Gaza de Israel, dijo el viernes el Ministerio de Salud de Gaza.
Dijo que otros 140 manifestantes fueron heridos de bala. Afirmó que cuatro de los perecidos fueron alcanzados en uno de los cinco campamentos que los organizadores de las protestas han erigido a lo largo de la frontera.
Las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron que dispararon contra palestinos que volaron parte de la cerca fronteriza, se infiltraron y corrían hacia donde estaban soldados. Añadieron que ninguno de los soldados resultó lastimado.
Las fuerzas israelíes dijeron que 14.000 se aglomeraron frente a la cerca fronteriza, quemando neumáticos, tirando piedras, bombas incendiarias y granadas a los soldados del otro lado de la cerca.
Miles de palestinos marcharon el viernes tras congregarse en cinco puntos junto a la cerca fronteriza. Los soldados israelíes respondieron desde el otro lado de la barrera con gas lacrimógeno y disparos.
El movimiento islamista Hamas, que gobierna Gaza, ha realizado protestas casi semanales desde marzo en la frontera, en demanda del fin del bloqueo egipcio-israelí del territorio.
Desde el inicio de las protestas, al menos 150 palestinos han muerto. Un soldado israelí fue muerto por disparos de un francotirador de Gaza en el mismo período.
El líder de Hamas, Ismail Haniye, en una protesta en Ciudad Gaza, declaró: "la determinación del pueblo palestino romperá el bloqueo".
El bloqueo ha dificultado la capacidad de Hamas para gobernar Gaza y ha agobiado a los 2 millones de habitantes de la franja costera. La electricidad funciona apenas unas cuatro horas al día, el desempleo alcanza a más del 50% y el agua no es potable.
Los reiterados intentos de reconciliar a Hamas con la Autoridad Palestina basada en la Margen Occidental han fracasado, intensificando la desesperación de los habitantes locales, lo cual ha provocado las protestas.
Esta semana la ONU empezó a supervisar el envío de combustible desde Catar a fin de hacer funcionar la única planta de electricidad de la franja.
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