Defensoría de la Niñez denuncia que casi 300 niños han sido vulnerados en sus derechos por Fuerzas Armadas y Carabineros

Esta mañana, Patricia Muñoz, Defensora de la Niñez se refirió a las cifras de niños, niñas y adolescentes (NNA) vulnerados por parte de Carabineros y Fuerzas Armadas en el contexto de las manifestaciones que han  ocurrido en el país.

Al respecto, Muñoz expresó que como Defensoría han recabando hasta el momento 283 casos de niños que han sido vulnerados en sus derechos. De ese total, indica, hay 43 menores de edad vulnerados heridos por balas (6 casos), perdigones (19 casos) o recibidos golpes (18) en situaciones que no justifican violencia.

La niña más pequeña de la que tienen registro, indica, tiene 9 años y sufre de una fractura en un brazo producto de una bala de Carabineros.

"Es una situación de máxima gravedad", señala Muñoz. Al respecto, pide a las autoridades a no relativizar la cifras, puesto que éstas - por el número de casos - no son excepciones, y son claras vulneraciones a los derechos humanos de las que tienen registro, puesto que  han visto fotos, videos, y se han reunido con los niños para tener su testimonio y ayudar en sus casos.

Los contextos en donde los niños han resultado heridos, señala, han sido variados. "Muchos se desarrollan en cotidianidad, son diversos los contextos", expresa. La gran mayoría se desarrollan en su propio barrio, cuando volvían de comprar pan con su familia, en su propio hogar o cuando iban a la casa de un vecino a jugar. Y otros, en donde estaban en marchas pacíficas junto a sus familias.

"Cualquiera sea el contexto, nada justifica que un agente del estado se permita vulnerar derechos humanos, eso no se tolerable en un estado democrático de derecho", agrega. 

Sobre si las personas deben llevar a sus hijos a manifestarse, indica que como Defensoría de la Niñez no pueden hacer un llamado a que asistan o no a protestas, puesto que "manifestarse es un derecho humano". Depende finalmente de los padres decidir si la marcha a la que asistirán puede significar un riesgo o no para el menor.