La Fiscalía de Análisis Criminal y Alta Complejidad de O’Higgins dispuso la detención de cinco funcionarios de Carabineros que habrían participado en el robo a las bodegas de Rancagua de la empresa de transporte de valores Brinks, ocurrido la tarde del 16 de agosto.
Los cinco serán formalizados este miércoles.
“Dan información, se preparan, miden los tiempos de reacción, cooperan con algunas situaciones puntuales que se ventilarán mañana en la audiencia y tienen una participación que influye directamente en la ejecución del día 16″, indicó el fiscal Carlos Fuentes.
Carabineros decidió su expulsión
“Ante la gravedad de los hechos, el Departamento de Asuntos Internos de Carabineros derivó los antecedentes a la Fiscalía y procedió a la detención de los involucrados, quienes serán eliminados de la institución”, indicó la policía uniformada en un comunicado.
Carabineros concretó la detención de cuatro de los uniformados.
La jefa de la Oficina Radio Carabineros, teniente Carol Montiel señaló en entrevista con el matinal de TVN que había otro uniformado detenido que no habría participado del robo.
“En definitiva y como información final, efectivamente son cuatro detenidos por el Departamento de Asuntos Internos de Carabineros y este quinto detenido no tiene relación al caso Brinks”, dijo.
Este quinto uniformado había sido detenido por la PDI y según el Ministerio Público, sí estaría vinculado al robo del 16 de agosto y a un atraco frustrado que quedó al descubierto a principio de año.
Fotografías los involucran
El fiscal Carlos Fuentes explicó que los cinco funcionarios aparecían en las fotografías que encontraron en los teléfonos incautados a los participantes.
“A raíz de las detenciones anteriores, de la incautación de equipos telefónicos de los imputados, nos dimos cuenta de que había reuniones de coordinación. Y resulta que en esas reuniones de coordinación, en fotografías tomadas de esas reuniones, aparecen justamente estos cinco funcionarios de Carabineros”, señaló.
Los cinco tendrían vinculación a la sustracción de los casi $12 mil millones de Brinks y uno de ellos, además está vinculado a la planificación de un robo por medio de un túnel a las bóvedas de la empresa Prosegur, ubicadas en el sector céntrico de Rancagua. El túnel fue descubierto en febrero por la Policía de Investigaciones y el atraco no se concretó. El Ministerio Público cifró en 24 mil millones de pesos el potencial botín de ese robo frustrado.
Tohá destacó mecanismos que facilitan detección
En un diálogo temprano con la prensa, la ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá, se refirió a las detenciones “en un delito de gran gravedad”.
“Se ha producido en diversas oportunidades en el último tiempo que ha habido hallazgos importantes en investigaciones de funcionarios de las policías involucrados en delitos. Y eso es gracias a que hoy existen ciertos mecanismos que facilitan la denuncia interna, que facilitan la denuncia anónima por parte de la ciudadanía por distintos canales, canales protegidos que además garantizan trazabilidad de la denuncia, respuesta al denunciante de cuál fue el resultado de los antecedentes que aportó, mecanismos internos para generar y controlar que no haya prácticas sospechosas o que puedan dar síntomas de que está habiendo elementos de corrupción al interior de las instituciones”, destacó la autoridad.
Un testigo protegido había mencionado una supuesta participación de carabineros en el robo. La existencia de ese testimonio, cuya veracidad se estaba analizando, fue confirmada en su momento por el entonces general director de la policía uniformada, Ricardo Yáñez, que a dos semanas del crimen afirmó que no había mayores antecedentes al respecto. La ministra Tohá, en tanto, por esos días habló de “testigos que habrían señalado que habría un involucramiento”.
El atraco
El robo se efectuó cerca de las 13.00 horas del viernes 16 de agosto en las dependencias de Brinks en Rancagua.
Hay un guardia y una cajera de la sucursal entre los involucrados. Los asaltantes escaparon esa jornada con un botín de $11.465.818.468 y quemaron varios vehículos para provocar caos en la capital de O’Higgins y facilitar su huida. En el atraco usaron pelucas y se caracterizaron con colores similares a los uniformes de las trabajadoras de la empresa.
En un procedimiento en Cerro Navia, recuperaron 228 millones de pesos sustraídos por los asaltantes.
El Ministerio Público ya logró individualizar y formalizar a 23 personas que habrían participado en el robo.