Más de cinco han sido los plenos que los ministros de la Corte Suprema han dedicado para analizar información revelada en reportajes de prensa que han dado cuenta de presunto tráfico de influencias en nombramientos judiciales, y pese a ello el tema parece estar lejos de agotarse.
Y es que a pesar de que en al menos tres oportunidades los integrantes del máximo tribunal descartaron reactivar la Comisión de Ética para el estudio de dichos antecedentes, la jornada de este lunes el presidente Ricardo Blanco comunicó que decidió convocar de oficio a la mencionada instancia.
“Este presidente en uso de sus facultades decidió convocar a la Comisión de Ética para conocer de los hechos que afectan a integrantes de este tribunal, por hechos que son de público conocimiento”, aseguró Blanco, quien estuvo flanqueado por 10 ministros titulares y dos suplentes.
Acto seguido, la ministra María Soledad Melo -quien fue nombrada como vocera el miércoles pasado, en el pleno extraordinario- acotó: “Todos los integrantes del tribunal pleno reconocen el trabajo que ha desarrollado el presidente y mantienen su voluntad de apoyar todas las iniciativas y proyectos que él ha impulsado”.
“Igualmente, reiteran su lealtad a la figura que representa para esta Corte Suprema y el Poder Judicial”, complementó la magistrada, haciendo frente, además, a los cuestionamientos que habían surgido las últimas semanas en torno a lo que fue catalogado por varios como un débil liderazgo por parte del presidente.
Pero pese a que durante la comunicación Blanco se vio respaldado por sus pares, en los pasillos del Palacio de Tribunales generó extrañeza que esta determinación se adoptara precisamente cuando los ministros que han aparecido señalados en notas que abordan los presuntos casos de tráfico de influencias no estuvieron presentes. Se trata de los ministros Jean Pierre Matus, Mario Carrozas, María Teresa Letelier y Ángela Vivanco.
Sí estuvieron presentes: Cristina Gajardo, Mauricio Silva, María Angélica Repetto, Leopoldo Llanos, Andrea Muñoz, Sergio Muñoz, Juan Eduardo Fuentes, Manuel Valderrama, Adelita Ravanales, Soledad Melo y los ministros suplentes Eliana Quezada y Juan Manuel Muñoz Pardo.
La comisión en cuestión es presidida por el mismo Blanco y está integrada por la ministra Adelita Ravanales y el ministro Mario Carroza. Este último eso sí, al ver involucrado en una de las polémicas publicaciones decidió inhabilitarse, por lo que asume en su lugar la ministra Gloria Ana Chevesich.
Molestia por Comisión de Ética
Dada la situación, fueron varios los personeros que no ocultaron su asombro y trasmitieron que el hecho generaría rápidamente la molestia de los ausentes.
De acuerdo con antecedentes recabados por La Tercera, la noticia no cayó nada de bien entre quienes han sido blanco de los cuestionamientos tras las publicaciones. Según transmitieron altas fuentes del Poder Judicial, no se explica por qué el presidente decidió dar este giro durante esta jornada cuando fue hace solo cinco días que habían acordado que la mencionada Comisión de Ética estaba obsoleta y que se requería reformarla.
Habían alcanzado consenso, como transmitieron, que se podría activar la comisión cuando existiera una nueva propuesta de reglamento.
De hecho, tras el pleno extraordinario del miércoles pasado, la vocera Melo fue tajante en sostener que la comisión mantenía una mentalidad y un “espíritu que es muy antiguo”, y que, por lo demás, no correspondía que esta entrara en funciones “mientras no avancen aquellas investigaciones (penales) que están en progreso”.
Según comentaron otros personeros, además, la idea de que el presidente convocara de oficio a dicha instancia no estaba en el radar de todos los ministros. Es más, los que no estuvieron en el pleno -de acuerdo con lo señalado por fuentes conocedoras de la materia- se enteraron por la prensa. No hubo comunicación previa sobre la materia.
Reformas al sistema
La determinación de Ricardo Blanco, cabe hacer presente, se dio luego de que esta jornada, por lo demás, se reuniera con el ministro de Justicia, Luis Cordero, con quien abordó los pasos a seguir frente a la prometida reforma al sistema de nombramientos.
“Hoy ya comenzamos a implementar la propuesta que hice al pleno y que se aprobó para generar una mesa de trabajo con los poderes Ejecutivo y Legislativo para perfeccionar el mecanismo de nombramientos de jueces, ministros de Cortes de Apelaciones y Corte Suprema”, señaló el magistrado, junto con confirmar que se reunió con el presidente de la Comisión de Legislación, Constitución y Justicia de la Cámara de Diputados, Miguel Ángel Calisto.
Al respecto, Cordero aseguró que la intención del gobierno es “apoyar el liderazgo que ha tenido el presidente Blanco en las propuestas que ha llevado él al pleno de la Corte Suprema para poder avanzar en la gestión de lo que es una evidente controversia de la cual el Poder Judicial está tratando de ser propositivo frente a la coyuntura y a situaciones de largo plazo”.
En la misma línea, el secretario de Estado llamó a realizar “cambios en las prácticas personales e institucionales”.