Compleja es la situación que enfrenta en estos momentos la abogada Marta Herrera. Esto, luego de que la tarde del martes el fiscal nacional, Ángel Valencia, le pidiera -a través de la directora ejecutiva subrogante, Sandra Díaz- poner sus cargos de jefa de las unidades de Anticorrupción y Asesoría Jurídica a disposición.
Pero a pesar de la solicitud, la otrora aspirante a liderar el Ministerio Público se negó a dejar la institución, lo que llevó a Valencia a recurrir a las atribuciones que la norma le da para disponer de los cupos que la profesional ostentaba.
De acuerdo con la normativa, si a un profesional considerado “de confianza” se le requiere la renuncia, éste tendrá 48 horas para presentarla, de lo contrario, el cargo se declara vacante.
Así las cosas, Valencia determinó pasar por alto la postura de Herrera y nombró como jefe subrogante de la Unidad de Asesoría Jurídica a Roberto Morales, quien hasta ahora se desempeñaba como subdirector.
En el caso de la Unidad Especializada Anticorrupción, en todo caso, la abogada permanece como titular, puesto que aún no se declara la vacancia, aunque el fiscalía nacional estaría preparando el nuevo nombramiento. De materializarse esta acción, esto implicará la salida inmediata de la profesional del organismo, aunque podría recurrir a las instancias que estime pertinentes para hacer sus descargos.
Consultados por el asunto -hasta el cierre de esta edición- la Fiscalía Nacional no entregó comentarios.