La madrugada de este jueves, la PDI allanó 17 domicilios en la comuna de Tirúa, en la Región del Biobío. El objetivo de la policía civil, por orden de la Fiscalía Regional de La Araucanía, era apresar a 19 integrantes de la la organización radical Weichán Auka Mapu (WAM), sindicados como los autores del crimen del comunero mapuche, Manuel Huenupil (48), quien fue asesinado el 5 de mayo del 2022 en Carahue, Región de La Araucanía.
De ese operativo, la policía logró apresar a ocho sujetos, en un procedimiento que concluyó, además, con uno de los sujetos fallecido luego de que disparara en contra de un funcionario de la PDI, quien resultó herido en un brazo a causa del ataque. De ese complejo operativo, sin embargo, logró escapar Sergio Alejandro Henríquez Valenzuela (30), quien es sindicado, según fuentes de La Tercera, como uno de los líderes de la WAM.
Henríquez, quien forma parte de las 10 personas que permanecen prófugas y que lograron burlar la acción policial y judicial, encabezaría la organización con otras personas. Sin embargo, por primera vez se conoce y sindica a uno de los líderes del grupo de acción radical, quien realiza acciones violentas, principalmente, en la zona sur de la Región del Biobío.
Pese a que líder de la organización logró escapar de la policía junto a otros nueve sujetos, también se logró la detención de Jhony Hueniupil, Heraldo Norin, Gonzalo Antio, Damián Saez, Jean Carlos Saez, Jerson Saez, Javier Mariñan y César Opazo, quienes también integran la WAM, según la Fiscalía de La Araucanía y quienes serán formalizados esta tarde.
El rol de Henríquez
El 5 de mayo de 2022, Huenupil, el comunero que integraba la comunidad “Quidiqueo Huenupil” llegó hasta el fundo “La Suerte” junto a sus hijos. Ese terreno, era ocupado como acto de reivindicación pacífica -según la Fiscalía- desde 15 años aproximadamente.
Sin embargo, ese día, los Huenupil se encontraron con tres sujetos en el predio, quienes señalaron que estaban ahí trabajando en la extracción de madera por orden de Sergio Alejandro Henríquez Valenzuela (30) y “su grupo Weichan”.
Horas más tarde de aquello, y tras el intento de los miembros de la comunidad “Quidiqueo Huenupil” de contactar a Henríquez, este llegó acompañado de cerca de 20 sujetos, quienes premunidos de armas de fuego de diferentes calibres intimidaron a los comuneros mapuche que ocupaban el lugar hace más de una década para que dejaran el lugar.
La comunidad, quienes no tenían armas, huyeron del lugar mientras los integrantes de la WAM les disparaban. En ese transcurso, Manuel Huenupil fue herido por la espalda mientras conducía su camioneta en compañía de su hijo, falleciendo minutos más tarde a raíz del disparo mortal que recibió en la parte posterior de su cuerpo.
Tras el crimen, una decena de testigos declararon ante los investigadores, que Henríquez es quien encabezó ese ataque y lograron posicionar en el lugar también al resto de la banda. Además, también existe prueba científica que los vincula con ese crimen, así como también la ubicación de sus teléfonos.
Sergio Henríquez ha estado en el radar de la policía no sólo como quien lideró ese ataque, sino que también como líder de la organización que además de llevar a cabo ese crimen también se dedica a robar madera y -según los antecedentes- traficar droga en la zona.
El fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido, afirmó tras el operativo de detención que van a seguir “desarrollando las diligencias que corresponden para ubicarlos porque nos parece que es muy importante, como lo mencionaba, dentro de la estrategia que hemos desarrollado desde hace varios años en la Araucanía y en la Región del Biobío, desbaratar este tipo de organizaciones que tienen como blanco principal las personas humildes, personas que pertenecen al propio pueblo mapuche y que tienen como objetivo final el lucro a través de actividades criminales como el robo con intimidación o la sustracción de madera”.
