El pasado 15 de julio la Octava Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago rechazó el recurso de nulidad que presentó la defensa y ratificó la sentencia del 3° Tribunal Oral en lo Penal de Santiago que fijó una pena de siete años de cárcel para el exoncólogo de la Clínica Las Condes, Manuel Álvarez, condenado como autor de dos delitos de abuso sexual de carácter reiterado en contra de mujeres que eran sus pacientes.
Cuando fue condenado, se dispuso la medida cautelar de prisión preventiva en contra del facultativo, sin embargo, su defensa -encabezada por César Ramos- presentó un recurso de amparo para que se revirtiera, además de un recurso de nulidad del juicio.
A fines de junio, la Corte Suprema había acogido el recurso de amparo, revirtiendo la medida cautelar del médico que permanecía recluido en la cárcel de Casablanca, en la Región de Valparaíso. De esta manera, se reemplazó la prisión preventiva por arresto domiciliario.
Con todo, la sentencia ya está ejecutoriada y -por ende- hay orden de detención vigente y personal de la Brisexme Punta Arenas y de Santiago lo están buscando.
“Despáchese orden de detención, en carácter de indefinida, en contra de Manuel Álvarez, a fin de que ingrese al Centro de Detención Preventiva de Santiago Sur, en calidad de sentenciado rematado, a cumplir la pena de siete años de presidio mayor en su grado mínimo por su responsabilidad en calidad de autor del delito de abuso sexual”, se lee en la orden de detención.
Gendarmería tenía asignada una plaza de cumplimiento en la exPenitenciaría, sin embargo su defensa solicitó que ingrese al penal del sur, que corresponde a su actual domicilio.
Por su parte, el abogado Cesar Ramos, aseguró: “Mi cliente no está fugado, el Ministerio Público sabe que su domicilio está en Punta Arenas hace dos meses y sólo se está esperando el informe de factibilidad para que ingrese a cumplir su condena en el penal de Magallanes”.
Frente a la situación, la abogada querellante Susana Borzutzky, representante de una de las víctimas, expuso: “Nosotros levantamos todas las alertas de que esto podía pasar. Manuel Álvarez estaba condenado a prisión efectiva por delitos de connotación sexual y aún no logramos entender cómo la Corte Suprema acogió el amparo y ordenó su libertad”.
“Nos sentimos frustrados, porque las instituciones nos fallaron. Ahora solo nos queda esperar que la policía lo encuentre a la brevedad, para que ingrese a cumplir su condena, impidiendo cualquier beneficio carcelario el día de mañana, atendiendo su desacato”, agregó.