Urgencias coordinan planes por eventual alza de contagios tras Fiestas Patrias
Jefes de clínicas y hospitales temen que reuniones sociales eleven demanda asistencial a fines de septiembre, por lo que se crearon sistemas de alerta y se reforzará personal de salud. Ministro Paris dijo que “la pandemia no ha cedido totalmente y tenemos que estar alertas”. También llamó a que las personas anoten los datos de amigos o familiares con los que se reúnan.
Si durante los meses de mayo y junio -pleno peak de la pandemia en la capital- las urgencias figuraban atestadas de pacientes, en el último mes estas unidades han retornado a su actividad habitual: pacientes crónicos agravados y traumas. Incluso, según datos de la Sociedad Chilena de Medicina de Urgencia (Sochimu), en las últimas semanas las consultas por patologías respiratorias -todas sospechosas de coronavirus, por protocolo- se han mantenido entre un 18% y 20% del total.
Pero en los hospitales y clínicas de Santiago, los equipos médicos de las áreas de Urgencia e Intensivo ya han comenzado a reunirse para planificar un probable aumento de la demanda asistencial por Covid-19, propiciada por las celebraciones de Fiestas Patrias.
Así lo detalla el jefe de la unidad de paciente crítico de Clínica Las Condes, Tomás Regueira, quien comenta que entre las medidas del recinto se ha dispuesto evitar las vacaciones de los equipos para fines de septiembre. También se ha reforzado la labor de coordinación de camas, para que se puedan reconvertir rápidamente en caso de requerirse. “Tenemos indicadores propios en la clínica para tomar el pulso a la pandemia: llevamos un recuento de la positividad de los PCR y la cantidad que se realiza, las consultas de urgencia por sospecha del virus y las camas que se van ocupando”, señaló el también presidente de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva, quien admite que es una preocupación ente sus pares lo que pueda ocurrir las dos semanas posteriores del feriado patrio.
Desde la Clínica Indisa, el jefe de Urgencias, Leonardo Ristori, asevera que el recinto nunca ha dejado de estar en “modo pandemia” y que la clínica tiene un plan de cinco etapas de complejización de sus unidades frente brotes del virus. De elevarse los casos y la demanda asistencial, dependiendo de la gravedad de la situación, la clínica podría “restringir las operaciones que no sean de urgencia, procedimientos invasivos como endoscopías que no sean urgentes”, advierte Ristori.
Entre otras medidas, también podría acelerarse una nueva reconversión de unidades exclusivas para pacientes respiratorios y el espaciamiento de horas médicas en consulta para evitar aglomeraciones.
El presidente de la Sochimu, el urgenciólogo Luis Enberg, adelanta los especialistas han conversado sobre este tema en los últimos días y que hay especial preocupación por el agotamiento del personal de salud. Sin embargo, precisa que si bien “se espera esta reactivación del virus para fines de septiembre, no con la gravedad del peak anterior”.
Eso sí, Enberg advierte que, si la demanda de casos respiratorios inicia un alza constante por sobre el 20% del total de consultas, se deben tomar medidas de mitigación, como volver a dividir físicamente la unidad de urgencia entre pacientes respiratorios y los de otras patologías.
Monitoreo de casos
La tendencia al alza, a propósito del desconfinamiento de más de la mitad de Santiago, ya ha sido percibida en centros como el Hospital Clínico UC. El jefe de la urgencia, Pablo Aguilera, asevera que “la urgencia es el farol que mira lo que está pasando, el termómetro. Desde punto de vista objetivo, en los números, vemos un aumento de las consultas respiratorias. De cinco o 10 diarias estamos llegando a 20. No es un alza tan discreta”.
El equipo médico también definió limitar las vacaciones del personal a fines de septiembre e inicios de octubre, además de separar los espacios de pacientes respiratorios y de otras patologías.
El monitoreo también se ha activado en hospitales como el Barros Luco. Allí detallan que existe un “comité Covid” que evalúa día a día indicadores como las consultas de urgencia, la ocupación de camas y el reporte de testeos. Con todo, Luis Castillo, jefe de la Unidad de Paciente Crítico, aseguró que se optimizarán los flujos de ingreso, con oferta de camas de alta complejidad, “las cuales se mantendrán operativas y duplicadas, considerando un eventual incremento de la demanda de pacientes”.
Un plan similar detalla el director del hospital el Carmen de Maipú, Juan Kehr. “Si encontramos un aumento del número de casos en las próximas semanas estamos preparados para pasar a un estado Naranja, que implica aumento de camas complejas o críticas, con mayor disponibilidad de ventilación mecánica”.
En tanto, en el sector suroriente de la capital, el Sótero del Río -que absorbe gran parte de la demanda de esa zona- su director, Gonzalo Menchaca, detalla que durante las últimas cuatro semanas, y con una mayor holgura de la pandemia, han propiciado días de descanso para los funcionarios de salud que han estado en “primera línea” desde marzo. Esto, con el fin de estar preparados para el rebrote “sin pensar en fechas específicas, en cualquier momento la curva epidemiológica puede subir”.
Registro de contactos
Desde el Ministerio de Salud, el ministro Enrique Paris sostuvo que “la pandemia no ha cedido totalmente y tenemos que estar alertas” durante el 18 de septiembre. Así mismo, propuso un mecanismo que permita facilitar el plan de trazabilidad, que consiste en el rastreo del entorno de los casos positivos de Covid-19. “Queremos proponer que las personas que tengan fiestas familiares, anoten la cantidad de personas, nombre y teléfono, en el caso de que ocurra un contacto intrafamiliar, podamos contactarlos”.
Mientras, la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, dijo que “estamos haciendo un llamado a realizar esta fiesta con mucha responsabilidad” y que “las comunas en cuarentena deben mantenerse en cuarentena”.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.