Adamo se gana a la Quinta Vergara y se lleva antorchas de Plata y Oro y Gaviota de Plata

Como si no fuera suficiente el tener que lidiar con las pifias del público que quería seguir escuchando a Daniel Muñoz y 3X7 Veintiuna, Salvatore Adamo tuvo que lidiar con un insólito problema para un festival de la envergadura de Viña del Mar: la falla de un micrófono que le obligó a comenzar nuevamente la primera canción de su set.

La falla se presentó al comienzo del show del artista, quien tuvo que dejar de cantar Es mi vida, debido a que el micrófono no estaba funcionando.

Para empeorar las cosas, los animadores no fueron de gran apoyo, ya que sólo decían "Eso le pasa a cualquiera", como si la falla hubiese sido causada por el perplejo cantante.

Pero el show tenía que continuar, y con el poder que le da su trayectoria sobre escenarios internacionales, Adamo continuó con sus canciones, ganándose al público de la Quinta Vergara con su música y desplante sobre el escenario. Esto, pese a que las fallas técnicas se repitieron en varias ocasiones.

Cerca de las 23.50 horas, y cuando el artista ya se había ganado al público, que se dividía entre sus admiradoras y las de Morrissey, los animadores salieron al escenario para hacer valer la voz de la Quinta Vergara, y entregarle las antorchas de Plata y Oro. "Es casi como si viniera de otra dimensión", dijo Adamo, agradeciendo los reconocimientos, antes de comenzar una nueva canción.

La presentación siguió con La Noche, que fue coreada por todos los rincones de una Quinta Vergara eufórica, y tras la cual los animadores volvieron a salir a la Quinta, para entregar la Gaviota de Plata.

El show finalizó con Mi gran noche, que Adamo cantó acompañado por Araneda y Gómez, que bailaban junto a él sobre el escenario.