China ordena inspección de seguridad tras accidente ferroviario

El gobierno asiático espera evitar nuevas tragedias como la ocurrida el sábado, cuando dos trenes bala colisionaran dejando un saldo de 39 personas muertas.




El gobierno chino ordenó el martes una campaña de dos meses con el objeto de revisar la seguridad de su sistema ferroviario a nivel nacional luego de que ocurriera una colisión entre dos trenes bala que dejó por lo menos 39 muertos.

El Ministerio de Ferrocarriles señaló en un comunicado que todas las oficinas locales del servicio ferroviario recibirían lecciones del accidente ocurrido el sábado en la ciudad oriental de Wenzhu y ordenó de inmediato que se realicen inspecciones de seguridad.

Un tren se estrelló con la parte trasera de otro que se había quedado detenido por haber sido alcanzado por un rayo. Seis vagones se descarrilaron y cuatro de ellos se precipitaron desde un viaducto situado a una altura de 20 a 30 metros de altura. Más de 190 pasajeros sufrieron heridas.

El Diario del Pueblo de China señaló que la campaña de inspecciones durará unos dos meses. Además, informó que el ministro de Ferrocarriles Sheng Guangzu se disculpó por lo que fue el peor accidente de trenes desde el 2008.

El ministerio dijo que las oficinas ferroviarias de varias ciudades de todo el país, tales como Urumqi en el noroeste, Kunming en el suroeste y Harbin en el noreste, entre otras, ya han comenzado la revisión de las medidas de seguridad.

El accidente constituye el revés más reciente a los planes de China de contar con una red de trenes bala. Diseñados para exhibir la creciente riqueza y avance tecnológico del país, el prestigio nacional ligado al proyecto de trenes a gran velocidad marchaban a la par con el programa espacial del país.

El gobierno de Beijing tiene programado ampliar su red ferroviaria de gran velocidad, que ya es la más extensa del mundo, para unir regiones muy apartados además de que planeaba vender sus trenes a América Latina y el Medio Oriente.

El mes pasado, lanzó con gran fanfarria la línea de trenes de alta velocidad de Beijing a Shanghai, con trenes que pueden viajar a una velocidad máxima superior a los 300 kilómetros por hora. La velocidad fue reducida de su plan original de 350 kilómetros por hora luego de que surgieran dudas en torno a su seguridad.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.