Construirán plaza y memorial en cementerio indígena hallado en pique de Metro

En octubre del año pasado, durante la construcción de la Línea 6 del Metro, que conectará a las comunas de Cerrillos y Providencia, se encontró en el pique ubicado en la esquina surponiente de Av. Pedro de Valdivia con Europa un cementerio indígena que dataría de al menos seis siglos antes de que Santiago fuese fundada, en 1541.

En el lugar y según la información entregada por el Consejo de Monumentos Nacionales, se encontraron osamentas de 30 individuos y más de 40 vasijas que pertenecen a la cultura Llolleo, que habitó la cuenca de la ciudad entre los años 0 y 900 d.C., seis siglos antes de que los incas y los españoles se instalaran en la región y que convirtieran a este lugar en uno de los hallazgos más importantes del último tiempo.

Por tal razón, la empresa de transportes, en conjunto con la Municipalidad de Providencia, se encuentran en reuniones para poder darle un uso cultural y conmemorativo a esta zona, que funcionará como un ducto de ventilación de la futura línea y que sería convertido en una plaza con un memorial que recuerde la presencia del milenario camposanto.

"La idea es instalar ahí un espacio de recogimiento con un memorial para que no quede en el olvido el encuentro de estas osamentas, que nos recuerdan a los primeros habitantes de Providencia, que vivieron hace más de 2.000 años. Tras una definición del proyecto, que realizamos junto con Metro el viernes pasado, sólo falta que éste sea aprobado por el Consejo de Monumentos Nacionales", explica el director de barrios y patrimonio del municipio, Angel Cabeza.

Por su parte, Metro señaló que elevará una solicitud al Consejo para que las piezas arqueológicas encontradas puedan ser dispuestas en un espacio especialmente diseñado en la renovada estación Los Leones, para poder así acercar a la comunidad con la cultura Llolleo.

"Estamos trabajando en forma coordinada con la Municipalidad de Providencia y el Consejo de Monumentos Nacionales en la conservación y preservación del patrimonio de la ciudad. Somos un símbolo de la ciudad de Santiago. Hemos sido protagonistas de su historia y queremos también serlo de su desarrollo y su futuro", afirma el gerente de desarrollo de proyectos de Metro, Jaime Adasme.

OSAMENTAS

Según explica Metro, las condiciones de conservación en las que se han encontrado las osamentas ha sido mala. Seguramente, afirma, producto de las crecidas del Río Mapocho que se encontraban a pocas cuadras del pique Europa y que durante años provocó muchas inundaciones en la zona. Aún así, estas piezas son valiosas y se les ha podido extraer algún grado de información, pues en el lugar no sólo han aparecido cráneos, sino que piezas dentales que han revelado características de la dieta que esta cultura consumía y sus prácticas cotidianas.

Las vasijas, en tanto, fueron en su mayoría aplastadas por la matriz que ejecutaba las excavaciones, pero según afirman en Monumentos Nacionales, serán restauradas en su totalidad y así podrán recuperar su forma original.

"Son de un tremendo valor, y nuestra intención como municipio es entregar todas las facilidades para recordar este lugar y que no pase inadvertido. La ciudad merece saber quiénes fueron sus primeros habitantes, sus formas de vida y su historia", remata Angel Cabeza.