Cristiano, dueño de los focos

Todas las miradas se posan en él. Ahora, más que nunca. Cristiano Ronaldo llegó a Rusia con el cartel de máxima figura de la Copa Confederaciones, como el encargado de guiar a la selección portuguesa hacia una nueva consagración, luego de ganar la Eurocopa 2016. Pero más allá de su mediática presencia, esta semana ha sido mucho más noticiosa para CR7.

Primero, por la denuncia de la fiscalía de Madrid que le acusa de un fraude fiscal por 14,7 millones de euros (casi 11 mil millones de pesos chilenos). Segundo, y lo más reciente, dice relación con su intención de abandonar el Real Madrid, una versión que la prensa europea ha cubierto intensamente, con la cual el apetito se abre para clubes como el PSG, de los pocos que podrían llegar a pagar una cifra altísima para quedarse con el goleador. En octubre pasado, Cristiano renovó su vínculo con el Madrid hasta 2021, con una cláusula de rescisión de mil millones de euros (US$ 1.121 millones).

En Kazán, será el estreno de Portugal frente a México, por el grupo A. Ayer, en la conferencia de prensa previa, el entrenador Fernando Santos blindó a su estrella. "Siempre he dicho que pongo las manos al fuego por Cristiano, por su carácter, su talento y su actitud como persona y como deportista. La selección apoya a Cristiano. Estamos muy unidos porque nos apoyamos incondicionalmente", afirmó el estratega.

Lo cierto es que la denuncia por fraude fiscal y el remezón que ha generado su eventual salida de la Casa Blanca trastocan el gran final de temporada que tuvo con los merengues, alcanzando el campeonato español y la Champions League, en cuya final fue decisivo con dos goles en el triunfo sobre la Juventus. Pero su éxito no tiene que ver con el solo hecho de participar de un plantel campeón como el de Zinedine Zidane, sino que influyó con goles en la parte decisiva de la campaña, cuando los torneos estaban finalizando.

En los últimos cinco partidos que jugó antes de llegar a la Copa Confederaciones hizo nueve goles, siete con el Madrid y dos con Portugal, éstos últimos en el choque ante Letonia por las Eliminatorias para la Copa del Mundo.

Revisando los datos globales del jugador, en sus ocho temporadas con el Real Madrid, la 2016-2017 fue su segunda campaña con menor cantidad de goles: 42 (en 46 partidos). Fue en su primera estancia con el club, en la 2009-2010, con Manuel Pellegrini en la dirección técnica, cuando hizo menos: 33. Claro, las 42 anotaciones del luso están lejos de las 61 que hizo en la temporada 2014-2015, cuando era una verdadera máquina de hacer goles y su estilo de juego era distinto al que ha cultivado en el último tiempo (mucha gambeta, por ejemplo). Pero la gran diferencia es que apareció en la parte definitoria para su club, algo que también puede aprovechar el seleccionado portugués.

La principal razón de este cambio fue un plan de trabajo que estableció Zidane, en conjunto con el preparador físico del elenco blanco, el italiano Antonio Pintus, quien llegó al Madrid por petición expresa de Zizou. El método del profesional consiste en exigir a los jugadores al límite de lo físico y luego llevarlos un poco más allá, con planes personalizados según las condiciones y el estado de cada uno de los futbolistas. Pintus llegó con fama de "sargento", pero su objetivo era evitar el exceso de lesiones. Con su método, por ejemplo, el 7 de Portugal pudo mostrar este año una de sus mejores versiones. Justo ahora, cuando se desempeña más como centrodelantero.

Quizás el paso de los años ha ayudado a la mutación de su estilo (tiene 32). Menos regates, menos bicicletas, pero un mayor control en la cantidad de partidos que juega y el mismo anhelo de protagonismo. Más cerca del área, buscando definir de primera, el artillero se acomodó como un nueve. Hay que ver si en Kazán estira su voracidad.

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