El partido más importante de Pizzi

La final de mañana ante Argentina tiene un gusto especial para el DT de la Selección. Y se le nota. Está tranquilo, aunque ha dormido poco en las últimas horas. Su familia lo acompaña en Estados Unidos. Sus duelos previos conta la albiceleste, en especial el último, los ha visto decenas de veces.




Mientras los seleccionados de la Roja se acomodan los zapatos de fútbol,  antes del inicio de la práctica en el Red Bull Arena, en Nueva Jersey, Juan Antonio Pizzi bromea con Cristián Leiva, analista de la Roja. Macanudo está de buen ánimo, ilusionado con la posibilidad de conseguir la Copa América Centenario. Y no lo oculta.

Lo que sí esconde el DT es que ha dormido poco. No por nervios, pero sí por trabajo. Ha visto más de 15 veces los videos de los últimos tres partidos del Equipo de Todos contra los transandinos. Solo o en compañía de sus asistentes. Quien más lo acompaña es Manuel Suárez, su ayudante de campo. Revisa las imágenes en el hotel donde se hospeda la Selección y ante cualquier duda, o nueva idea, acude a las imágenes que le proporcionaron los analistas del conjunto chileno.

El santafesino está a pocas horas de enfrentar el partido más importante de su carrera: ante su natal Argentina. No da ninguna señal de tensión, pese al complicado arranque que tuvo en la Copa. "Pizzi siempre ha estado tranquilo, pero es lógico que se está mejor cuando se gana. Siempre ha tenido nuestro respaldo. No es posible que en Chile se piense en cambiar técnico cada cuatro meses", ha dicho Arturo Salah, presidente de la ANFP, en reiteradas oportunidades.

Sus primeros días en Norteamérica, sin embargo, no fueron fáciles. Cayó ante Argentina y le ganó de manera muy sufrida a Bolivia. Los cuestionamientos a su gestión se intensificaron luego de cada presentación, más aún cuando los hinchas seguían con el recuerdo victorioso de Jorge Sampaoli. Seguramente, el momento más tenso fue cuando algunos fanáticos lo increparon en la banca, mientras la Roja igualaba ante los altiplánicos, en Boston: "¿Qué le hiciste a la Selección? ¡Que vuelva Sampaoli!", pedían con rabia. No reaccionó, ni atinó a mirarlos.

Nunca señaló públicamente estar incómodo por el complicado momento, pero sus gestos así lo acusaban. En los duelos de la selección chilena discutía constantemente con los árbitros y en cada opción de gol que la se fallaba, miraba al cielo y se tomaba la cabeza, en señal de resignación.

Poco a poco su idea fue recepcionada por sus dirigidos. El partido clave, que marcó el despegue del equipo fue, sin dudas, la victoria ante México. Pizzi celebró cada gol, como un desahogo. Miraba a los palcos y apuntaba a su señora, Carolina Reynoso, quien no paraba de gritar. Ese encuentro abrió el romance entre Macanudo y sus dirigidos. El DT, en camarines, felicitó individualmente a cada jugador y se juramentaron seguir sumando alegrías.

"Con los resultados la crítica cambió. Fui claro desde el inicio y mi examen es criterioso. Me siento muy tranquilo con el nivel de la Selección", señaló el entrenador.

En las conferencias de prensa volvieron a aparecer sus sonrisas, el Pizzi distendido que debía anotar las preguntas porque se perdía en sus ideas: "Antes me preguntaban si iba a seguir el próximo partido y ahora no pregunta nadie", dijo el DT previo al duelo ante Colombia, por las semifinales.

Sus días de concentración parten temprano. Es uno de los primeros en llegar a desayunar, para no fallar en ningún detalle de la planificación estimada. "Pizzi es un hombre súper organizado, que no deja nada al azar. Lo he visto muy tranquilo y creo que ha sido la tónica de su proceso. Ni siquiera cuando estaba cuestionado por la gente se desesperó o algo", dicen desde el directorio, donde reconocen, ya en la final, que se propusieron llegar a esta instancia o, al menos, dentro de los cuatro primeros del torneo.

Su señora y sus hijas lo han acompañado en casi los 30 días que lleva la Roja en Estados Unidos. Comparten en los momentos que tiene libre y en algunas ciudades han salido de compras. No tiene problemas para firmar autógrafos y en la llegada a San José, para preparar el duelo ante México, por cuartos de final, incluso se desvió para tomarse fotografías con fanáticos del Tri, que le recordaban su paso por León, que llevaban varias horas esperándolo.

Pizzi busca cumplir su máximo sueño. Al mando de la Roja, Macanudo vive sus momentos más gratos desde que se puso el buzo de técnico.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.