Fallecidos en accidentes registran histórica baja en una década

Una sostenida baja en la cantidad de fallecidos en accidentes de tránsito muestra Chile en la última década, según el último reporte de la Comisión Nacional de Seguridad del Tránsito. En lo que va del año se han producido 1.442 decesos en siniestros viales, la cifra más baja en los últimos 10 años. Esto considerando que el promedio de muertos por esta causa es de 1.600 personas anualmente (ver infografía).

De acuerdo con la entidad, entre enero y diciembre de 2017 la tasa de mortalidad por estos eventos -los que son considerados como "epidemia" por la Organización Mundial de la Salud- alcanza los 4,1 muertos por cada 100 mil habitantes. El año pasado la tasa era de 4,6 personas.

Gabriela Rosende, secretaria ejecutiva de la Comisión Nacional de Seguridad del Tránsito (Conaset), planteó que se han tomado medidas que podrían haber generado este efecto positivo: "Promover la protección a usuarios vulnerables, como los peatones o ciclistas, además de los sistemas de retención infantil".

A esto se suma, agregó Rosende, la discusión del proyecto de ley de convivencia vial que incluye la reducción de 60 a 50 kilómetros por hora la velocidad máxima en zonas urbanas, lo que también lleva a que los conductores tomen consciencia de lo que viene en cuanto a una futura normativa.

Sin embargo, la autoridad admitió que el país está lejos de cumplir con la meta de la OMS de reducir un 50% las muertes por siniestros viales. "Hemos dado pasos pero no está todo hecho", afirmó.

Alberto Escobar, gerente de estudios del Automóvil Club de Chile, dijo que el efecto disuasivo que da la presencia policial en carreteras es clave: "Las personas temen que les quiten la licencia o dañar a otros si los fiscalizan".

Añadió que es clave la aplicación del alcotest masivamente, controles que este fin de año crecerán un 14% respecto a 2016.

Carolina Figueroa, presidenta de Fundación Emilia, sostuvo que la autoridad destaca la baja en la mortalidad, pero "vemos que no hay un refuerzo de controles a los conductores para detectar consumo de alcohol, una de las principales causas de lesiones graves o muertes". La activista agregó que el gobierno aún no adquiere los denominados "etilómetros evidenciales", que permiten que los niveles de ingesta no deban ser ratificados con otras pruebas como la alcoholemia en los centros de salud.

Al respecto, Rosende dijo que ya se implementó un laboratorio que servirá para calibrar esos instrumentos, inversión de $ 300 millones. Además, se emitirá un decreto que flexibiliza los requisitos que deben tener estas herramientas para ser utilizadas en Chile. Esto significará un avance en la posibilidad de incorporar los elementos, ya que los fabricantes señalan que las exigencias eran imposibles de cumplir.

Esta modificación implica que la medición respiratoria verificaría de manera precisa los gramos de alcohol en sangre, para asegurar la exactitud de la muestra y así evitar distorsiones en el proceso judicial. La norma debe ser firmada por los ministerios de Salud e Interior. Luego de ello se prepararán las bases de licitación para adquirir las unidades requeridas por Carabineros.

El Ministerio de Transportes, en paralelo, formó este mes una comisión -integrada por diversos servicios públicos- para conocer los alcances que tendría la implementación de un narcotest en el país, el que permite detectar el consumo de sustancias ilícitas como cannabis y cocaína.

La cartera pedirá informes sobre el funcionamiento del instrumento en otros países. "Se espera que en las próximas semanas se pueda dejar listo un informe que plantee los costos que tendría la medida", dijo Rosende.