Globos de Oro: musicales, un chileno y algunas lágrimas

La última vez que una comedia o algo similar eliminó todas las posibilidades del drama para llevarse los mayores premios de la industria del cine fue en el 2012, cuando El artista encantó a medio Hollywood. Su saldo a favor fueron cinco premios Oscar, incluyendo Mejor Película y Director, aunque un mes antes ya había encontrado su destino al liderar la entrega de los Globos de Oro, donde ganó Mejor Película (Comedia o Musical), Mejor Actor y Mejor Banda Sonora. Históricamente los premios que otorga la Asociación de Periodistas Extranjeros de Hollywood han sido un predictor relativamente acertado. Y, si alguna vez no han estado en sintonía con el Oscar, jamás han perdido el privilegio de ser los segundos premios en importancia en Hollywood. Ahora, tal como el 2012, la gran favorita también escapa a los dramas, el género preferido de este tipo de ceremonias: La La Land, la comedia musical impulsada por su espíritu lúdico y su tributo a los clásicos de la Metro-Goldwyn- Mayer y de Jacques Demy tiene 7 nominaciones, liderando el grupo.

Los galardones se otorgan este domingo a las 21.30 hrs. en la clásica y distendida ceremonia (mucho más que el Oscar al menos) que se desarrolla en el hotel Beverly Hilton, en el corazón de Beverly Hills, el barrio de las estrellas millonarias (en Chile los transmite la señal TNT). A diferencia de la francesa El artista, que de a poco fue ganando puntos entre la crítica y el público americano, La La Land viene corriendo en primer lugar desde hace al menos cuatro meses, cuando se estrenó en el Festival de Venecia. Una y otra vez han aparecido potenciales contendores (Moonlight y Manchester by the sea le siguen con 6 y 5 nominaciones), pero una y otra vez se ha sobrepuesto a las amenazas. La comedia musical protagonizada por Emma Stone y Ryan Gosloing como dos aspirantes a artistas de fama en Los Angeles tiene el músculo narrativo y el perfume de libertad necesarios para haber ya ganado el apoyo de las asociaciones de críticos de Nueva York y de Boston a través de sus respectivos premios.

Con fecha de estreno para el 19 de enero en Chile, La La Land es la corroboración del talento del director y guionista Damien Chazelle (nominado en esas categorías), que antes hizo la elogiada Whiplash.

A diferencia del musical californiano favorito de la temporada, Moonlight y Manchester by the sea son dos sólidos dramas de vidas difíciles en la Costa Oeste. El primero, dirigido por el afroamericano Barry Jenkins, transcurre en Miami y cuenta la niñez y juventud de Kevin, un chico pobre y vulnerable de las barriadas de la ciudad. Kevin es interpretado por tres actores y se espera que la película redima de alguna manera el vergonzoso panorama del 2016, donde las cintas dirigidas o protagonizadas por negros fueron olvidadas de la temporada de premios. Manchester by the sea es, por el contrario, una historia de blancos enfrentados al abismo de la pérdida familiar desde el momento en que el hermano mayor de Lee muere intempestivamente y a él le toca ser el tutor de su sobrino.

Empatados con cuatro nominaciones están Florence Foster Jenkins, la emotiva fábula sobre la muy mala cantante de ópera homónima (que vivió en la primera mitad del siglo XX) y su intento por trascender más allá de sus veladas de sociedad. Aquí la columna vertebral es la actuación de Meryl Streep como Florence Foster Jenkins, secundado por Hugh Grant, impecable como su esposo. Lion, que se estrena en febrero, es otro caso real, pero ahora en clave de drama intenso sobre Saroo Biertley, un niño indio que a los 5 años perdió contacto con su familia y fue adoptado por una pareja de australianos. Llegada la adolescencia, Saroo decide ir otra vez en busca de sus padres biológicos a su madre patria. Actúan Dev Patel (Slumdog millionaire) como Saroo, Nicole Kidman y Rooney Mara, entre otros.

También tiene fecha de estreno local el filme bélico Hasta el último hombre (19 de enero), producción dirigida por Mel Gibson sobre el caso de Desmond Doss, soldado que peleó en el frente del Pacífico durante la Segunda Guerra a pesar de que su religión le impedía usar armas. La cinta tiene tres nominaciones, las mismas de Hell or high water, el largometraje sobre dos bravucones ladrones del Medioeste estadounidense, dirigida por David Mackenzie. Las empata Nocturnal animals, el suntuoso drama de Tom Ford donde Amy Adams es una galerista de arte asediada por su pasado y su viejo matrimonio.

Esta ceremonia será singular en la medida que el director chileno Pablo Larraín tendrá una participación doble: su película Jackie, con Natalie Portman, fue nominada a Mejor Actriz, y Neruda compite por la Mejor Película Extranjera. Si Portman se mueve como favorita en una contienda donde su eventual amenaza sólo podría ser Isabelle Huppert, Neruda tiene un duro match frente a las muy bien recibidas Toni Erdmann (Alemania) y Elle (Francia).