Gobierno peruano afirma que quiere rescatar con vida a los 36 secuestrados por Sendero Luminoso
En este escenario el Presidente Humala acortaría su presencia en la Cumbre de las Américas, este fin de semana, donde sólo permanecería 24 horas.
El gobierno peruano ejecuta un plan "silencioso y articulado" para rescatar "con vida" a 36 trabajadores de una empresa sueca y una peruana secuestrados el lunes por la guerrilla Sendero Luminoso, que ayer disparó a un helicóptero y mató a una policía que participaba en las acciones de búsqueda.
"La prioridad del Presidente Ollanta Humala es liberarlos con vida", dijo hoy el ministro de Defensa, Alberto Otárola, al subrayar que tropas del ejército y la policía han cercado la región donde se produjo el plagio, en Kepiashato, distrito de Echarate, en la selva de la región Cusco (sudeste).
Esa parte del país forma parte del extenso Valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), la mayor cuenca cocalera del país donde operan bandas de narcotraficantes y que es refugio de una columna considerada un remamente de Sendero Luminoso, organización derrotada a mediados de los años 90.
Patrullas combinadas de soldados y policías intensificaron las operaciones en esa zona montañosa, de tupida vegetación, y encontraron "una especie de madrigueras que habrían servido de campamento" a los senderistas, añadió Otárola.
Ese hallazgo se hizo en la zona de Lagunas, en Alto Postaquiato, la misma zona donde fue baleado la tarde del jueves el helicóptero en que murió la copiloto y capitana de la policía, Nancy Flores Páucar, de 32 años y quien recibió un disparo en el pecho. Otro policía y un civil resultaron heridos.
El ataque se produjo cuando el helicóptero se disponía a aterrizar para recoger a una patrulla militar. Los senderistas dispararon desde un monte cercano, dijo a la prensa el suboficial de la policía, Luis Guerrero Chumacero, herido en las piernas.
De los 36 trabajadores, todos de nacionalidad peruana, 28 pertenecen a la empresa sueca Skanska y ocho a la empresa Construcciones Modulares, que brindan servicios al consorcio internacional que explota los yacimientos gasíferos de Camisea, los más importantes de Perú, detalló la firma sueca.
Los secuestradores piden un rescate de diez millones de dólares.
La búsqueda de los captores se efectúa como parte de un plan "silencioso y articulado" de inteligencia, aseveró el ministro de Justicia, Juan Jiménez en declaraciones al Canal N.
Jiménez ratificó que "un Estado democrático como el Perú no negocia con delincuentes terroristas" e instó a los familiares de los plagiados a confiar en la labor que están realizando las autoridades para rescatar sanos y salvos a los secuestrados.
Ayer el Presidente Humala afirmó que "en muy corto tiempo esperamos resolver el problema, buscando que el costo sea cero, de manera de recuperarlos sanos y salvos".
Debido al secuestro el mandatario acortaría su presencia en la Cumbre de las Américas de Cartagena, este fin de semana, donde sólo permanecería 24 horas, dijo desde Colombia el canciller Rafael Roncagliolo a la emisora RPP.
El gobierno implantó el miércoles el estado de emergencia en Echarate por 60 días, con la suspensión de algunas garantías individuales como los derechos de inviolabilidad del domicilio y el derecho de reunión. También dispuso el envío de 1.500 soldados a la zona.
El plagio fue liderado por Martín Quispe Palomino, "camarada Gabriel", hermano menor de Víctor, "camarada José", quien es el jefe de la facción senderista en el VRAE.
Gabriel incursionó en la madrugada del lunes en Kepashiato y secuestro de un un hotel a los 36 trabajadores, que fueron llevados al interior de la selva.
"Los helicópteros están sobrevolando la zona, se están cerrando todas las salidas, la zona es muy agreste, hay muchos acantilados", dijo a AFP el capitán José Miranda desde la comisaría de Kiteni, cercana a Kepashiato.
El ataque al helicóptero y el secuestro es atribuido a una columna "narcoterrorista", término con el cual el gobierno define a los remanentes del senderismo que actúa en alianza con narcotraficantes.
Sendero Luminoso desató una guerra interna que entre 1980 y 2000 dejó un saldo de 70.000 muertos y desaparecidos.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.