Gobierno venezolano toma Éxito
Las autoridades ocuparon las tiendas de de la cadena de hipermercados Éxito, a cuyos propietarios acusan de especulación.
El gobierno de Venezuela ocupó "temporalmente" las seis sucursales que operan en el país de hipermercados Éxito, cuya expropiación anunció el domingo el presidente Hugo Chávez por haber "remarcado" precios de productos después de la reciente devaluación del bolívar.
Según Chávez, hacía falta una reforma jurídica para ejecutar la decisión. Pero el control pasó de hecho a manos del Ministerio de Comercio este martes, en medio de una fuerte polémica entre los mismos trabajadores, que están divididos frente a la medida de estatización.
Los que la apoyan acusan a los dueños de explotadores, mientras que quienes la rechazan temen perder sus puestos de trabajo y consideran que sus compañeros han sido engañados con promesas de que se les otorgará la propiedad de la empresa.
La cadena Éxito, de capital francés y colombiano, emplea a unas 5.000 personas de forma directa y a unas 10.000 de manera indirecta.
La parte francesa, el grupo Casino, desestimó el lunes el impacto que la expropiación tendría sobre sus números, por considerar que el aporte venezolano al total de sus negocios totales es insignificante.
A manos de Comerso
El ministro de Comercio, Eduardo Samán, reiteró que la cadena "ha violado las leyes venezolanas, ha incrementado los precios sin justificación económica y además ha especulado".
"Esta empresa se convierte a partir de hoy en una empresa socialista, donde no cabe la usura y el acaparamiento", añadió.
En diciembre pasado el gobierno lanzó Comerso (Corporación de Mercados Socialistas), una corporación de comercios de diversa índole. Ahora Éxito será incorporada como una "red de megatiendas del hogar".
Esto permitirá "entregarle de una sola vez a nuestro pueblo artículos comprados con las divisas del petróleo venezolano (que ahora llegará) a todas las casas a través de una nevera, un televisor, etcétera", según Samán.
Mientras, en la Asamblea Nacional, portavoces de oposición criticaron la expropiación de la cadena.
Dijeron que el argumento de la especulación era una excusa y que la toma constituía una violación de la Constitución, "que establece los mecanismos mediante los cuales el Estado, el pueblo y la empresa privada se tienen que poner de acuerdo para crecer y alcanzar la mayor suma de felicidad posible", en palabras del diputado Juan José Molina, del partido Podemos.
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