"Hay que sincerar cómo se financia la política en Chile"

Aprimera hora del viernes, tras dos semanas en Estados Unidos, Andrés Velasco regresó a Chile. En el aeropuerto de la capital lo esperaba uno de sus más estrechos colaboradores, con quienes conversó -casi a diario- para tomar el pulso de la evolución en el caso Penta: Rafael Guilisasti. "Lo vi bastante entero, con convicciones muy claras de cómo va a enfrentar esta situación", explica el empresario y uno de los principales financistas de la campaña presidencial del ex ministro de Hacienda, que decidió, esta vez, salir del segundo plano y tomar la defensa del economista, a quien se le vincula en las irregularidades en el bullado caso Penta.

El publicitado allanamiento de la residencia de Velasco en Las Condes el pasado jueves fue un punto de inflexión para el también vicepresidente de la Sofofa, de relación cercana con la Presidenta Bachelet y que afirma que llegó la hora de conversar -en serio- respecto del financiamiento a la política. Y para ello, espera contar con el respaldo de todos los sectores políticos, incluidos aquellos que hoy desde la Nueva Mayoría, el domicilio de buena parte de los miembros de Fuerza Pública, le piden explicaciones al presidenciable. "Velasco tiene una preocupación para que esto se aclare y que haya realmente un avance de cómo se regula la actividad política en Chile", dice.

Más allá del tema judicial, aquí Velasco se juega la imagen. Hasta ahora se ha optado por acusar una intencionalidad detrás de su vinculación a este caso. ¿Comparte eso?

Cuando una persona tiene el rol político y el nivel de buena evaluación ciudadana que tiene Andrés, hay intereses en frenar este proceso que ha venido desde que Andrés se presentó a la primaria, esta buena acogida que ha tenido.

¿De dónde provienen esos intereses de los que usted habla?

Todo potencial competidor o amenaza. Naturalmente que la política tiene bastante de competencia y tendrán que venir desde quienes sienten que Andrés podría, en un escenario futuro, influir. Tampoco sabemos si va a ocurrir, podría influir, pero no hay muchas figuras políticas en los procesos relevantes.

¿Cuánto ha pesado en este episodio el hecho de que Andrés Velasco se haya posicionado como el líder contra las malas prácticas de la política? ¿No cree que eso puede haberle pasado la cuenta?

Como no se ha clarificado, indudablemente que pueden existir esas intenciones, pero lamento que estemos en un proceso de alto contenido mediático, es difícil entrar a analizar todos los factores que entran en esta situación y sus derivados, pero este no es el caso Velasco, es una derivado de una investigación al grupo de empresas Penta.

¿Y dónde están, a su juicio, los principales enemigos de Andrés Velasco?

La candidatura  de Velasco, su figura y las ideas que representa remecen profundamente a lo que podríamos llamar el corpus de ideas que actualmente sustenta a la Nueva Mayoría, y muchos de los amigos de Andrés, no todos, vienen de la antigua Concertación, otros somos independientes. El produce un impacto en este sistema político.

¿Qué le parece el manejo dado por el SII a este caso?

Tengo la impresión de que el SII no hizo bien la pega en el sentido de indagar, no se citó a ninguna persona emisora de las boletas para explicar los servicios profesionales, o escuchar la otra parte. Pudimos ver que el SII fue objeto de una brutal presión política. No aportaron los llamados del presidente del PS para acelerar el proceso y los llamados de otros partidos con otros llamados para que esto se apurara.

En el comunicado que Velasco mandó el 7 de octubre dice que su vínculo profesional con Penta se remonta hace ya tres años. ¿De qué se tratan específicamente los servicios por los que recibió pagos?

Velasco vive profesionalmente prestando asesorías y charlas dentro y fuera del país, en lo que es su especialidad, que son las finanzas, la macroeconomía, así como hay otros expertos con distinta reputación en el mercado. Ese es el giro que tiene la actividad profesional de Velasco. Dentro de esos clientes está Penta.

¿Y cómo ha operado esa vinculación en estos tres años?

Esto es como todos los profesionales independientes que prestan intermitentemente servicios. Hay requerimientos, algunas veces pueden ser informes, y muchas veces son charlas. Ustedes han visto a Andrés en estas actividades económicas que organizan bancos, instituciones financieras o a veces centros de opinión pública. Algunas son remuneradas y otras no.

¿Y dejó de hacer ese tipo de asesorías mientras era candidato?

Habría que ver la fecha, pero mientras estuvo de candidato, al menos dos meses antes del período legal, que le dedicó completamente a la candidatura. No tengo recuerdo que haya tenido espacio para hacer eso. Ahora, la sociedad que está imputada es la sociedad en la que Andrés realiza todo su giro de actividades, y esos antecedentes fueron puestos a disposición del SII.

¿Velasco sigue prestando esos servicios?

Naturalmente.

¿A Penta?

No sé hoy, no son servicios continuos, en parte de sus viajes al exterior Andrés presta servicios a otras instituciones internacionales. El giro de Andrés ha continuado.

¿No sólo con Penta, también con otras empresas?

Naturalmente.

¿Y es posible separar la figura del candidato presidencial, que tiene posturas públicas que despiertan el interés en sectores del empresariado, y su rol como asesor de esas empresas?

Andrés desarrolla una actividad profesional, Andrés no es candidato ni precandidato a nada. Andrés fue candidato presidencial en primarias, hoy encabeza un movimiento de ideas. Las ideas de Andrés son validadas por la ciudadanía y yo no las puedo imputar a que pertenezcan a un grupo de intereses particulares. Si no, estaríamos todos inhabilitados de opinar públicamente. En la vida pública se entra en restricciones por el marco de la ley, como cuando se es parlamentario, ministro o subsecretario. Pero cuando no se tiene ningún rango se pueden prestar servicios y mantener ideas. Y naturalmente todos trabajamos y no por eso alguien que tenga opiniones públicas va a depender de su empleador.

¿No cree que eso contribuye a que sus críticos lo acusen de ser el candidato de las empresas?

No, porque el empresariado no es un Ejército. Pareciera que el empresariado fuera un partido político homogéneo y eso es una caricaturización. Decir "esta persona goza de la simpatía del sector empresarial" no es cierto. En el mundo empresarial hay empresarios que tenemos distintas ideas políticas, distintas sensibilidades, y no encuentro nada de malo que existan empresarios que simpaticen con las opiniones que ha dado Andrés. El tiene en su acervo un acervo de seriedad y de calidad intelectual en sus políticas. Nadie se puede llamar a sorpresa de que las ideas de Andrés tengan simpatía en el sector empresarial, pero también en otros sectores de la población. Incluso en la coalición de gobierno.

¿Cuánto cuesta una charla o asesoría de Andrés Velasco?

No sé, eso no te lo puedo decir, pero me imagino que son cifras importantes, porque la charla no es la charla misma. Andrés tiene una vasta experiencia en finanzas internacionales, manejó la crisis del 2009, es requerido por el FMI y eso constituye el capital cultural de una persona y ese capital cuando se es independiente tiene un valor.

La denuncia que nace a partir de la declaración judicial del ex ejecutivo de Penta Hugo Bravo es que -más que por servicios prestados- se hacían pagos como aportes de campaña...

Es que aquí hay tres cosas que distinguir. Lo primero son los servicios que presta Andrés y que son servicios ejecutados. El segundo elemento tiene que ver con lo que fue el período de figuración pública después de terminar su período como ministro de Hacienda, es decir, hace cinco años. Porque si bien la etapa de campaña propiamente tal es de 30 días antes de las primarias, previamente eso y posteriormente también, un grupo de personas, en las que yo me encuentro, hemos ayudado y hemos sostenido la figuración pública de Andrés Velasco. ¿Y qué significa ayudar y sostener? Hay que tener oficina, hay que financiar giras, esto es una actividad que está en un enorme vacío legal. No somos un partido político, no somos un think tank, nos parecemos a una ONG informal si quieres ponerlo en un paralelo con las cosas que existen. El período anterior y posterior a la primaria no es un período de campaña política. Estamos sí, y no tenemos ningún reparo en decirlo, y hemos pedido ayuda y apoyo, no a Penta en este caso, para mantener esta actividad. Sostenemos las ideas que representa Andrés.

Además de Velasco, ¿hay algunos otros colaboradores que hayan prestado servicios a Penta o que hayan recibido algún tipo de pagos por asesorías?

Lo desconozco, pero de lo que conozco les he pedido ayuda a bastantes amigos empresarios para mantener esta actividad. Lo considero completamente legítimo.

Ha asumido el rol de recaudador…

Pero quiero ser preciso: la campaña tiene un período y sostener las ideas de Andrés en el tiempo es un período más largo. Para la campaña nosotros pedimos y recibimos aportes reservados, sobre los 100 millones de pesos, que están declarados en el Servel y que representan el 60% de los ingresos.

¿Usted no se reunió con Penta?

No, y no voy a dar nombres, porque son situaciones privadas, yo tengo el derecho de llamar a mis amigos y decirles "mira, estamos mirando el futuro del país, queremos pensar, ayúdanos si estamos de acuerdo", porque además aquí no estamos eligiendo a un parlamentario, estamos buscando gente que tiene adhesión y simpatía por las ideas de Andrés.

¿Van a mantener en reserva los aportes que ustedes conocen?

Absolutamente. Las empresas por ley son sujeto legítimo del financiamiento de las campañas. Y están sujetas a la ley de donaciones políticas y es de carácter reservado. Es importante no confundir el saco. Si el legislador determina que las empresas son los principales sujetos privados con beneficios tributarios para dar, la dan en carácter reservado. Si se quiere cambiar esta situación en el futuro, se tiene que cambiar por ley. Tampoco es como señala el diputado Andrade, eso de "que dé los nombres". No es tan simple, hay un contrato aprobado por el legislador entre la empresa que dona y el partido o candidato que recibe.

A partir de este episodio se puede generar un consenso en torno a la necesidad de revisar cómo se financia la política.

Yo estoy de acuerdo. La actividad política, como en todo el mundo, es altamente intensiva en cantidad de recursos humanos. En algunas épocas ese recurso es voluntario, pero otra parte de ese recurso humano es remunerado. Las campañas se han profesionalizado bastante, la remuneración es un factor muy alto, fundamentalmente recursos humanos y publicidad. Y así como los empresarios son sujetos legítimos de financiamiento, una segunda fuente para sostener la actividad política, que es muy conocida, son los operadores políticos. Hay gente cercana a candidatos que trabaja de manera constante, pero como el financiamiento de la política es tan bajo, los partidos tienen planillas muy bajas, estos llamados operadores políticos, cuando el partido o una coalición conquista el gobierno o las municipalidades, algunos de ellos trabajan allí o también el candidato, por el esfuerzo desplegado buscan colocar al colaborador. Y eso, no seamos cínicos, ha existido habiendo cambio de gobierno, no solamente por color político, sino también por los balances de los distintos partidos políticos.

¿Lo de los operadores se da por igual en todos los sectores?

Yo diría que esto es transversal, en todas partes. Es una práctica que hay que sincerar,  porque yo soy partidario que de esta situación la política salga fortalecida y para eso hay que sincerar cómo funciona y cómo se financia la política en Chile, no se trata de escupir al cielo o hundirnos todos, seamos razonables. Lo que está regulado son los períodos de campaña. Si se quiere hablar de dinero y política, entonces pongamos todas las cartas sobre la mesa.

Dentro de las prácticas que hay que sincerar debiera estar también entonces el tema de las boletas para aumentar los aportes o para colaborar fuera del período de campaña.

Aquí está normado el período de campaña. En el resto hay un vacío tremendo. Sobre las boletas, esa es una atribución del SII, porque hay mucho profesional que presta boletas. Se habla de la falsificación ideológica, y estamos entrando en un terreno que si se profundiza se genera una gran incertidumbre en la forma cómo operan las empresas. Lo que define son los ingresos necesarios para generar renta, y hoy en la economía moderna, mucho de lo que se vende son intangibles: marcas, eventos, asesorías comunicacionales, manejos de crisis, un montón de cosas atingentes a un giro de la empresa. No entremos en un delirio de hacer ilegítima la prestación de servicios, porque no sólo es un tema político, se pone en cuestión el modo en que las empresas funcionan.

Usted dice que colabora para sostener las ideas de Velasco. Eso se hace apoyando económicamente no sólo a él, sino también a su equipo.

Respaldando un equipo, sus colaboradores. Ustedes saben que hoy día las comunicaciones son profesionales, todos tienen alguna agencia o tienen profesionales no sólo en la parte política, también en la parte económica, y ustedes conocen mejor que nosotros este negocio. Alguien tiene que costearla, o si no queda la política solamente para los que tengan recursos propios. Yo no tengo ningún problema en señalar, pero para mí esto es una actividad privada que yo organizo con amigos privados, si ellos autorizan o quieren dar el nombre como yo doy el mío…

¿Usted hace aportes mensuales?

Sí, hacemos aportes mensuales, hacemos fundamentalmente aportes mensuales. Y también todos los partidos declaran que tienen, ¿cómo le llaman? Los militantes y las cuotas. Yo no tengo por qué negar eso, no tengo por qué desconocerlo, pero es lógico, estamos en un vacío legal.

Es el sino de los candidatos que van más allá de una elección, como es el caso de Marco Enríquez-Ominami.

Bueno, es que, reitero, estamos en un vacío legal, acuérdense siempre del incumbente, porque el que está en el Estado tiene la visibilidad pública. Ustedes saben que todos los personajes y cargos relevantes en el Estado tienen su equipo de comunicaciones y de periodistas, no hay ningún misterio. Ellos tienen una oportunidad, tienen una ventaja. Muchas figuras emergen desde los ministerios, y no tengo ningún problema, porque son funciones políticas. Pero también veamos qué pasa con el que no ha estado en el Estado. Hay otras personas que quieren competir, por eso digo, la competencia en política es muy importante cómo se regula la actividad política.

¿Respalda la idea de un financiamiento público para los partidos? 

Tiene que haber un aporte público a los partidos, pero con una contraprestación de los partidos, y creo, además, hay que definir y legislar sobre los movimientos de ideas, o incluir en ese ámbito a todo el conjunto de ONG o actividades que se desarrollan para fines públicos y que reciben aportes de distinta naturaleza.

¿Y usted cree que un aporte estatal a movimientos distintos de los partidos va a encontrar apoyo en el oficialismo?

Nosotros planteamos la idea, pero los que la legislan son otros. Aquí hay que ir dando pasos para adelante. Aquí se van dando pasos, el acuerdo Longueira-Lagos, fue un paso, yo creo que se regularizó. Acuérdense que en ese acuerdo había una pequeña amnistía para atrás, que estaba en un capítulo de la ley, dijeron "esto comienza desde ahora". No digo que se haga una amnistía ahora, pero vamos mejorando y vamos mirando con un solo objetivo: que la política en Chile mejore.

Si se trata de prácticas tan extendidas, ¿cree que quizás debiera replicarse el modelo de ese acuerdo y sincerar a través de una suerte de amnistía el reconocimiento de estas prácticas?

Bueno, no quiero que sea interpretado como diciendo "mire, no queremos que se investigue". Tenemos que seguir a fondo, que se vean todas las aristas que tiene el fiscal en torno al caso Penta, pero que ojalá el sistema tenga la capacidad de ver esto y dar un salto adelante.