Heller tiene la venia de las leyendas azules

Jugadores y técnicos históricos no temen a que una persona concentre el poder de las principales decisiones en la U. Sólo Jorge Socías advierte: "Es peligroso que cualquiera con plata pueda hacerse de un club tan importante".




Carlos Heller abre la puerta del vestuario de Universidad de Chile e ingresa ilusionado. Compartirá, como tantas veces, con los jugadores después del partido. Adentro lo esperan hombres como Luis Eyzaguirre, Sergio Navarro, Braulio Musso y Rubén Marcos. Carlitos apenas supera los dos años de vida cuando el Ballet Azul comienza a consolidarse. Pero, al igual que su padre, ya se maravilla por el azul de la camiseta.

Los futbolistas disfrutan de su compañía. Carlos es hijo de Agustín Heller, directivo de la U desde 1960 hasta 1969. El dirigente dejó el cargo justo cuando la primera época dorada de la institución llegaba a su fin. En 1964, en ese camarín, el destino de su retoño parecía sellado. Sería hincha de la U.

Cinco décadas más tarde, con Carlitos ya convertido en un exitoso empresario, e instalado en la presidencia de Azul Azul, esas visitas al vestuario se volverían habituales. Ahora, Heller no sólo tiene la facultad de ingresar cuando quiera, sino que también puede decidir qué jugadores lo integran.

Más aún después de conocerse la compra de acciones que realizará en los próximos meses y que, alcanzando el 50,2 por ciento de la propiedad, lo convertirán en el controlador del club. Para los históricos de la institución, es momento de celebrar.

"Es maravilloso que haya pasado esto. Se acaban los roces, las controversias, los conflictos. Se logrará la unidad que necesita el club", comenta Héctor Hoffens al saber la noticia.

La alegría del ex delantero es compartida por otras leyendas azules que, en distintas épocas, vistieron la camiseta de la U. Sergio Navarro, uno de los que vio ingresar a Heller al camarín cuando apenas caminaba, se suma a la expectación.

"Pónganle mi firma, y cóbrenme la palabra después: Carlos Heller va a levantar, sí o sí, el estadio de la U. Es una persona que cumple sus promesas", afirma el capitán de Chile en el Mundial de 1962.

Poder absoluto

Uno de los temas a tener en cuenta es qué pasara en Universidad de Chile con este inédito escenario, en el que Carlos Heller tendrá escasa oposición.

Para la mayoría de las ex figuras del club, la condición de hincha del empresario augura un exitoso porvenir. "Heller es analítico, inteligente, escucha opiniones. Seguramente, se rodeará de un buen equipo. En ningún caso tomará todas las decisiones. No será un dictador", asegura Sergio Vargas.

Visión similar tiene Cristián Romero, hasta hace poco jefe técnico del fútbol formativo azul, pero ahora desligado del conjunto universitario.

"Si fuera peligroso que una persona tenga el poder que ostentará Carlos en la U, estaría regulado por ley. Me consta que todo lo hace pensando en el bien del equipo", señala el Relojito.

En otra vereda se encuentra Jorge Socías, ex jugador y DT campeón con los laicos. "Lo que haga Heller me da lo mismo. Me parece peligroso que cualquiera con plata pueda hacerse con el destino de un club tan importante", disparó.

Aun así, en estos momentos, el vestuario por el que todos ellos pasaron algún día, se prepara para tener un único dueño.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.