Historias de bochornos y rarezas protagonizadas por el deporte chileno

El partido entre Chile y Ghana disputado este miércoles quedará en la historia, no por el 1-1 que se dio en la cancha, sino como otro bochorno en el deporte chileno. Fue un duelo que enfrentó muchos problemas de organización y que se "coronó" con un conflicto en el equipo africano, que tardó más de media hora en salir a jugar el segundo tiempo. Acá presentamos ejemplos de otras historias vergonzosas y extrañas en que se ha visto involucrado el deporte nacional.

Bolivia se retira: Chile y Bolivia igualaban a dos el 28 de marzo de 1953, en Lima, por la que sería después la Copa América. A los 68 minutos el juez inglés Richard Maddison expulsa al altiplánico Víctor Bown, decisión que no fue acatada por su equipo, por lo que el árbitro da por terminado el encuentro con la victoria chilena.

El partido más corto de Chile: El 31 de enero de 1942, la "Roja" y Argentina igualan sin goles, también por el torneo continental.. A los 44 minutos de la primera parte, el cuadro chileno se retira de la cancha molesto por la actuación del árbitro peruano Conca, quien había dejado sin sanción dos penales en el área argentina. Los albicelestes se quedan con la victoria reglamentariamente.

Un partido sin rival: Después de superar a Perú, Chile debía enfrentar a la Unión Soviética por un cupo para el Mundial de Alemania 1974. El 26 de septiembre de 1973, en Moscú igualaron sin goles, pero la revancha no se jugó, ya que los soviéticos no viajararon por el golpe de Estado que se había producido en el país.

Así, el día del partido, Chile salió a la cancha, del Nacional, que estaba siendo utilizado como recinto de detención, y debió marcar un gol ante el arco vacío (lo hizo Francisco "Chamaco" Valdés). La FIFA dio a la "Roja" un triunfo por 2-0.

Pasaportes adulterados: En 1979, a 13 de los 18 jugadores de la Sub 20 de Chile que viajaron a Paysandú, para jugar por la clasificación a los Panamercianos, se les descubrió pasaportes falsos, que adulteraban la edad.

El ténico recibió una condena de 541 días de presidio menor y Chile perdió el cuarto lugar.

Las sillas que volaron en la Davis: La suspensión de la localía por dos años fue el castigo de la Federación Internacional de Tenis (ITF) contra Chile, por los graves incidentes en la confrontación con Argentina, en abril de 2000.

La serie se jugó en el estadio techado del Parque O'Higgins de Santiago y fue suspendida el viernes 7 de abril cuando hinchas lanzaron sillas y objetos a los jugadores visitantes, mientras se disputaba el segundo single, entre eNicolás Massú y Mariano Zabaleta. El árbitro general del partido, Tonny Hernández, dispuso que el juego se reanudara sin público, pero el equipo argentino no acató la orden, abandonó la competicion y al día siguiente regresó a Buenos Aires.

Aunque se le dio el triunfo a Chile (5-0), el país debió enfrentar la suspensión, que se levantó tras un año y medio.

"Maracanazo": el 3 de septiembre de 1989 Chile se retiró del Estadio Maracaná a los 69', cuando perdía 1-0 ante Brasil. Era el último partido de una Eliminatoria muy polémica y terminaba con los jugadores chilenos cargando a Roberto Rojas, quien tenía la cara ensangrentada.  Una bengala que había caído se suponía que le había causado las heridas.

Pero después de varios días, y denuncias que ponían en duda la versión chilena, el "Condor" reconoció que él se había cortado. Los castigos fueron duros, ya que la "Roja" no pudo participar en las Eliminatorias para el Mundial de Estados Unidos 1994.

En ese proceso, Chile debió jugar como local ante Venezuela en Mendoza, ya que la FIFA castigó al Nacional, tras los incidentes en el compromios entre la "Roja" y Brasil, el 13 de agosto.

Todos expulsados: En 1975, en un duelo entre Chile y Uruguay por la Copa Juan Pinto Durán, el árbitro Sergio Vásquez decidió expulsar a todos los que participaron en una pelea: 19 jugadores. Adolfo Nef y Víctor Pizarro, por Chile, y el arquero uruguayo Corre fueron los únicos no sancionados.

Por un maní: en abril de 1993, Chile recibió a Canadá, por la Copa Davis, por la permanencia en Zona Uno Americana. Fue un partido polémico, en donde Chile se impuso por 3-1 con Belus Prajoux como capitán y Sergio Cortés, Gonzalo Fernández, Marcelo Ríos y Gabriel Silberstein como jugadores.

Los singlistas eran Cortés y Fernández. A este último le recrudeció una tendinitis y se designó a Ríos (de 17 años) como su reemplazo, con sólo un partido copero(contra Bahamas, en el doble con Silberstein y que perdió).

Los canadienses tenían  a Pierre Lamarche como capitán y a Andrew Sznajder, Martin Larendeau, Bryan Gyeto y Sebastien Lareau en el equipo. Sznajder le ganó el primer partido a Ríos; Cortés venció a Lareau y el antofagastino y Silberstein vencieron a Larendeau y Gyetko. El domingo, Cortés doblegó a Sznajder.

Fue en ese duelo cuando el aliento del público molestó al árbitro general Martín de Gaínza, ex tenista argentino. Pidió varias veces silencio, amenazó con suspender el duelo y Lamarche molestaba al público. Hasta que el capitán canadiense le mostró un proyectil al juez: un maní.  De Gaínza suspendió la confrontación y dijo que "esto es intolerable. No existen las garantías para seguir con el partido. Temo por mi seguridad y por la de los jugadores visitantes. Es un clima de guerra el del público chileno. Esto parece Vietnam".

Incentivos mundialistas: Chile llegó al Mundial Sub 20 de Qatar de 1995 con la base del equipo que había logrado el tercer lugar en el Mundial Sub 17. Pero la "Rojita" fue eliminada en primera ronda en el grupo con España, Japón y Burundí. Pero el escándalo apareció cuando se supor que algunos jugadores chilenos habían aceptado un incentivo de US$ 2.500 de parte de un grupo asiático especializado en las apuestas en partidos de fútbol. Frank Lobos fue el más destacado de los involucrados, que recibieron una suspensión de diez partidos oficiales tras comprobarse el hecho.

Detenidos: el 20 de julio de 2007 Chile perdió con Argentina por las semifinales del Mundial Sub 20 de Canadá, pero los problemas en la cancha se agravaron afuera, con un confuso incidente con la policía que terminó deteniendo a la delegación chilena, acusándola de agresión y daños. A su vez, los jugadores reclamaban abuso, debido al uso de bastones eléctricos y gases.

Pese a esto, Chile pudo jugar por el tercer lugar, con el que se quedó.