Imagen de Presidente de Colombia cae y Santos reconoce errores de su gobierno

El Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijo que aunque lo inquieta la caída de su imagen en las encuestas considera que "la popularidad está para gastarla" y que esa situación es normal en la gestión de un jefe de Estado.

"Son gajes del oficio y la popularidad está para gastarla. Yo sé muy bien a dónde quiero llevar al país, tengo muy claro el puerto de destino y vamos en la dirección correcta. No por un bajonazo en las encuestas voy a cambiar de rumbo", dijo Santos en una entrevista que publica hoy el diario El Tiempo de Bogotá.

Las encuestas se conocieron a finales de junio, en medio de la controversia por una enmienda constitucional para reformar la Justicia que recibió muchas críticas porque beneficiaba a congresistas y funcionarios de diferentes niveles que son investigados por diversos delitos.

Un sondeo de la firma Gallup indicó que el 48% de las personas tiene una imagen favorable del mandatario, 16 puntos porcentuales menos que en abril pasado.

A su vez, una encuesta de Datexco señaló que el 55% de los colombianos ve a Santos de una forma positiva, frente al 65% de un sondeo hecho hace dos meses.

Santos objetó la reforma constitucional y convocó al Congreso a dos jornadas de sesiones extraordinarias la semana pasada con el único objetivo de archivar la enmienda, lo que consiguió con el respaldo de los partidos que forman la coalición de gobierno.

Aunque el gobierno insiste en que los artículos polémicos fueron aprobados a último momento por una comisión de conciliación, que fusionó los textos votados en el Senado y la Cámara de Representantes, la controversia también lo afectó por las opiniones de quienes consideran que reaccionó tarde para impedir que la enmienda fuera aprobada de esa forma.

La crisis costó el cargo al ministro de Justicia, Juan Carlos Esguerra, quien renunció y dijo que asumía de esa forma su responsabilidad política, aunque hizo énfasis en que no fue culpable de lo ocurrido porque los congresistas no lo dejaron estar presente en la votación definitiva.

Sin embargo, numerosos congresistas del oficialismo aseguran que el gobierno "se lavó las manos" y dejó que la llamada opinión pública le "echara el agua sucia" solamente al Parlamento.

"El grave error fue que el ministro apoyó la conciliación sin haberse dado cuenta de sus repercusiones", admitió Santos, tras indicar que el gobierno ya aceptó su cuota de responsabilidad política con la renuncia de Esguerra.

"No entiendo cómo más puedo expresar esa responsabilidad que le corresponde al gobierno. Se me cayó el ministro de Justicia, ni más ni menos. Bajé 15 puntos en la favorabilidad. ¿Qué más cuota de responsabilidad quiere que asuma?", dijo el mandatario.

Santos, que empezó su período de cuatro años como Presidente en agosto de 2010, señaló que aprenderá de sus errores y que los enmendará tratando de delegar menos.

"Debemos aprender de nuestros errores. Le voy a poner más cuidado a lo micro, sin entrar en la microgerencia, porque ese estilo no me parece efectivo. El presidente no se puede meter en todos los detalles de todas las políticas. Eso es equivocado. He sido buen administrador y he delegado. Pero de pronto sí tiene razón en que estoy delegando demasiado", dijo.

"Tal vez hemos fallado y eso lo hemos discutido en el seno del gobierno en la forma de comunicar nuestros resultados, que son muchísimos. Por supuesto que nos hemos equivocado y haremos las rectificaciones necesarias. Pero las encuestas son para escucharlas, no para gobernar en función de ellas", agregó.

URIBE
Asimismo, comentó que seguirá sin responder las críticas del ex Presidente Alvaro Uribe (2002-2010), quien aunque es copartidario se ha convertido en líder de un sector de la oposición, y negó rumores en el sentido de que está efectuando negociaciones secretas con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).

"Le repito por enésima vez lo que he dicho: cuando encuentre que existen las condiciones apropiadas para iniciar algún tipo de proceso para terminar este conflicto, que ya va a cumplir medio siglo, el país lo sabrá. Y tenga la seguridad de que: primero, si se inicia algún proceso, no será de espaldas al país. ¿A quién se le puede ocurrir semejante insensatez?", concluyó.