En Isla de Pascua se construyó el primer leprosario del país

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En 1888, año de la anexión de la isla a Chile, un informe del médico de la corbeta General Baquedano, reveló que los isleños tenían una alimentación deficiente y habitaciones poco higiénicas. Además, se presentaban casos de tuberculosis y lepra entre jóvenes.




La lepra fue introducida en Isla de Pascua en 1889, posiblemente desde Tahití, lo que determinó la prohibición de que los isleños abandonaran la isla, relata un artículo publicado por el médico Ernesto Payá en la revista de la Sociedad Chilena de Infectología en 2009.

En 1888, año de la anexión de la isla a Chile, un informe del médico de la corbeta General Baquedano, reveló que los isleños tenían una alimentación deficiente y habitaciones poco higiénicas. Además, se presentaban casos de tuberculosis y lepra entre jóvenes.

"Debido a que no existía ninguna prevención, esta enfermedad se extendió rápidamente, presentándose muchos nuevos casos en los años sucesivos", señala el reporte del médico de la corbeta.

Pese a las condiciones deplorables en que vivían los isleños, fue recién en 1917 que se comenzaron a tomar medidas tras las visita de monseñor Rafael Edwards a la isla, un año antes.

Se dicta la ley 3.220 por la cual se autoriza la construcción de un leprosario y una escuela. Finalmente, a fines de la década del setenta, se construyó un sanatorio, que reemplazó al antiguo leprosario.

En 1992 sólo quedaban tres leprosos en el sanatorio, los que fueron tratados, dados de alta y volvieron con sus familias, dice el artículo de Payá.

Registro gráfico

En 1950, durante el gobierno de Gabriel González Videla, se realizó el primer vuelo oficial a Isla de Pascua y en 1952 llegó hasta el lugar el fotógrafo chileno Marcos Chamudes, quien realizó uno de los primeros reportajes gráficos al leprosario de la isla. La serie de imágenes son ahora parte del catálogo del Museo Histórico Nacional desde el año 1989.

Según el libro de Karen Berestovoy, dedicado a la obra de Chamudes y editado por Altazor y la Universidad Sek, el trabajo del profesional seguía la línea de la fotografía de denuncia en que se muestran casos de "sujetos indefensos y marginados".

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