Jean-Marie Le Pen arremete contra su hija tras ser suspendido del FN y le retira su apoyo

El fundador del partido francés de extrema derecha Frente Nacional, Jean-Marie Le Pen, retiró hoy el apoyo a su hija y líder de la formación, Marine, en respuesta a la suspensión de militancia que le impuso la agrupación política el lunes.

Jean-Marie Le Pen, de 86 años, aseguró que "por el momento" no desea una victoria de su hija en las elecciones presidenciales francesas de 2017.

"Sería escandaloso que semejantes principios morales gobernasen el Estado francés", afirmó en declaraciones al canal Europe 1 el fundador del FN, que aseguró que luchará por sí mismo "con todos los medios" posibles.

Le Pen aseguró sentirse "avergonzado" de que su hija llevase su apellido y dijo que se sentiría aliviado si Marine, de 46 años, se casase y adoptase un apellido diferente. 

El FN suspendió el lunes de militancia a su fundador y anunció que se someterá a votación en una asamblea extraordinaria si se pone fin a su presidencia honoraria, poniéndose así de lado de Marine Le Pen.

Jean-Marie Le Pen volvió a referirse hace poco a las cámaras de gas de los nazis como un "detalle de la historia". El político ya había sido condenado por estas declaraciones. Sin embargo, la fiscalía retomó las investigaciones preliminares por negar crímenes contra la humanidad.

Tras un tenso pulso, a mediados de abril Jean-Marie cedió a la voluntad de su hija y renunció a presentarse como candidato en las elecciones regionales de diciembre. Lo ocurrido en las últimas horas profundiza aun más la crisis abierta en el partido por el enfrentamiento entre padre e hija.

Las declaraciones de Le Pen suponen desde hace tiempo un problema político para su hija, que lo sucedió al frente del partido. Marine Le Pen intenta desde hace años darle una imagen más moderada al FN, sin moverse mucho de la postura contraria a los extranjeros, la UE y el islam. 

Marine Le pen criticó las declaraciones de su padre, que calificó de "excesivas", y aseguró que reafirman la necesidad de suspenderle de militancia.

Atrapada en el fuego cruzado entre padre e hija se encuentra otra integrante del clan, Marion Marechal-Le Pen. La diputada de 25 años fue designada por su abuelo como candidata para las elecciones regionales de diciembre después de verse él mismo obligado a renunciar a ello.

Aunque siempre ha apoyado a su abuelo, Marechal-Le Pen aseguró hoy sentirse "sorprendida" por sus recientes comentarios, según dijo en una entrevista publicada por el diario "Le Figaro".

La nieta del fundador del FN aseguró que necesita tiempo para reflexionar si debe seguir con su campaña electoral. "Es posible que sea preferible (tener) un candidato más neutral para el interés del movimiento. Quiero lo mejor para la región y, en particular, no quiero ser rehén de Jean-Marie Le Pen", afirmó.