John Grisham cuestiona a la justicia en su nueva novela

Poco es lo que confía en el sistema judicial. Tuvo entusiasmo como estudiante de Derecho, pero Sebastian Rudd cree que las malas prácticas y los procedimientos que le hacen honor a la justicia están viciados en tribunales.

"¿Quién podría creer en los juicios justos cuando estos brillan por su ausencia? La presunción de inocencia ha pasado a ser presunción de culpabilidad", señala Sebastian Rudd en Un abogado rebelde, la última novela traducida al español del escritor estadounidense John Grisham (61).

"Partner es mi chófer, mi guardaespaldas, mi ayudante legal y mi único amigo. Me gané su lealtad cuando un juzgado lo absolvió de matar a un agente de narcóticos infiltrado", dice Rudd, el abogado inusual del pueblo llamado Milo, que anda armado y tiene como oficina una camioneta Ford negra.

"El no está preocupado por la moral o los valores. El está haciendo su trabajo", dijo John Grisham, el año pasado, en una entrevista al canal de televisión CBS, sobre su protagonista, defensor de traficantes y de hombres y mujeres cuestionados.

El autor bestseller de títulos como El Informe Pelícano, que ha vendido más de 250 millones de ejemplares en el mundo, también es abogado y Doctor en Derecho.

"Hay que revisar el envejecimiento de la población penal en EEUU. Hay personas durante 20, 30 años encerrados por delitos que ni siquiera han sido violentos", señaló Grisham cuando promocionó Un abogado rebelde en su país.

"¡Rudd Basura, fuera de Milo!", son las frases que reciben a Sebastian Rudd en los juzgados cuando llega a defender a sus representados. Uno de los casos que produce más repudio es su defensa a Gardy, quien es acusado de asesinar a dos niñas en Milo.

"Un abogado de mi naturaleza se ve obligado a operar desde las sombras. Mis adversarios están protegidos por sus placas, uniformes y ese sinfín de ornamentos del poder gubernamental", dice Sebastian Rudd en Un abogado rebelde. Comparado con el memorable detective de Raymond Chandler, "es como un Philip Marlowe del siglo XXI con una voz directa, tosca, áspera, pedante a la vez que poética", apuntó Benjamin Percy en The New York Times Book Review.

Exageración o no, Grisham vuelve a divertir e instala a su nuevo héroe entre los títulos más vendidos de la semana. "¿Cuál es su mayor logro?", le preguntaron en The Guardian. "Ser capaz de escribir libros que entretengan a la gente en todo el mundo", respondió.