Jorge Sampaoli no se despega de la Roja

Faltaban pocos minutos para las diez de la noche del lunes 6 de junio cuando Jorge Sampaoli se sentó frente al televisor en el living de su casa. El entrenador casildense no quería perderse detalle del encuentro entre la Roja y Argentina. Era el estreno chileno en la Copa América Centenario y el ex seleccionador miraba ahora desde lejos la suerte de Chile.

Sus cercanos aseguran que sigue a Chile "como un hincha más", aunque su preocupación se hizo evidente después de la derrota en el debut. A Sampaoli no le gustó el funcionamiento del equipo de Pizzi y se lo hizo saber a su entorno. Repetiría el ritual en su casa cuatro días después, cuando el equipo nacional venció 2-1 a Bolivia en el segundo partido de la fase de grupos. Pese al triunfo, el rendimiento nuevamente generó preocupación en el ex técnico de Universidad de Chile. "Se preocupó después de los primeros dos partidos. No le gustó la forma que mostró el equipo. Respeta mucho el trabajo de Pizzi, pero quiere que a estos jugadores les vaya bien. Siente un gran cariño y aprecio por todos los que conforman la Selección. Por eso siempre quiere lo mejor para ellos", expresa un cercano al DT.

Después de aquel partido, sin embargo, su foco de atención cambió. El 12 de junio abordaba un avión rumbo a España para, al día siguiente, tener su primera aparición pública en Sevilla, donde dirigirá a partir de la próxima temporada. Desde entonces, cuentan sus colaboradores, se ha enfocado ciento por ciento en sus nuevas labores y desafíos profesionales en el aquipo andaluz.

Por lo mismo, vio en un hotel de Sevilla junto a Jorge Desio el triunfo de la Roja 4-2 sobre Panamá. Ese día le gustó el trabajo de sus ex dirigidos y comentó con sus cercanos que ése sí se parecía más al equipo que había obtenido la Copa América 2015.

Todo eso en medio de sus primeras acciones como técnico no oficializado de Sevilla. De hecho, en los tres días que duró su paso por España, acordó los términos y condiciones de su contrato con el club, trabajó en los detalles de la planificación, e incluso, aprobó algunos nombres que integrarán su nuevo plantel. Dio la venia para la llegada del volante español Pablo Sarabia, del japonés Hiroshi Kiyotake y se comunicó con el francés de origen tunecino Hatem Ben Arfa, a quien quiere como figura principal de su proyecto.

Tras regresar a Chile el 16 de junio, permaneció apenas cuatro días en el país. Tiempo suficiente para ver y disfrutar el 7-0 de la Roja sobre México. "Ese partido lo dejó muy satisfecho. Dijo que el equipo dio una exhibición y que debieron ser más goles", puntualiza otro de sus colaboradores.

El 20 de junio un nuevo viaje. El vuelo LAN 439 lo llevó hasta Argentina, donde permaneció hasta ayer. En su país vio las dos semifinales del torneo continental, aunque con la mente cada vez más enfocada en su nueva experiencia como entrenador. "Es sabido que el sueño de Jorge es dirigir en Europa. Está a un paso de lograrlo y, por lo mismo, desde el viaje a Sevilla no ha parado de trabajar en eso", aseguran desde el círculo del casildense que, de todas maneras, centró su atención en el trabajo particular de Charles Aránguiz y Eduardo Vargas, dos de los mejor valorados por el técnico a quienes, incluso, no descarta pedir para Sevilla.

Mientras, en su nuevo equipo se apuran para dar por cerrada la etapa del ex DT Unai Emery, única traba para que el estratega casildense sea oficializado. Su cuerpo técnico, de hecho, que estará integrado por Juan Manuel Lillo, Jorge Desio, Matías Manna e Iñigo Domínguez, ultima detalles para el traslado definitivo a Sevilla que, dependiendo de cómo se resuelva la situación de Emery, se produciría mañana o el lunes. La presentación oficial de Sampaoli como nuevo entrenador sevillista se producirá con seguridad en el transcurso de la próxima semana.

Con eso en mente, el estratega se ilusiona con sus ex pupilos. "Se le nota entusiasmado con lo que ha visto de Chile. Ve bien a los muchachos y siente que aún tienen mucho por dar y entregarle al país. Ahora está en la fase de dar vuelta de manera definitiva la página de la Selección y enfocarse con todo en los nuevos desafíos, que son muy importantes también", narra uno de sus cercanos, quien además puntualiza y destaca la alegría que le generan a Sampaoli los nuevos éxitos del equipo. En tanto, Jorge Desio, aunque escueto y a título personal, asegura a La Tercera estar "realmente muy contento con lo que le está sucediendo a la Selección". Fiel reflejo del sentir del cuerpo técnico más exitoso en la historia de la Selección Nacional.

Sampaoli se alista para volver a dirigir, cinco meses después de dejar de ser seleccionador chileno. Con su nuevo desafío en Sevilla a la vuelta de la esquina, eso sí, el DT no se olvida de la Roja.