La tregua de Héctor Tapia y ByN corre peligro por salida de Fuenzalida

El técnico siente que Colo Colo no se ha reforzado como pretendía y que con la partida del lateral se despotencian.




Las preocupaciones para Héctor Tapia están a la orden del día. Si ya estaba inquieto porque el puntero y el defensa central que solicitó  parecen lejanos, ahora que José Pedro Fuenzalida fichó en Boca Juniors, sus problemas aumentaron. Es que se le va una de las piezas fundamentales de Colo Colo.  

Por lo mismo, el técnico se reunirá esta tarde con la plana mayor de Blanco y Negro para presentar sus requerimientos ante el complejo escenario presente, ya que quedan apenas ocho días para el cierre del libro de pases del fútbol chileno.

Esta situación nuevamente tiene disconforme al entrenador del Cacique, porque más allá de la urgencia por el plazo fatal que se aproxima, siente que el equipo no se ha reforzado bien y que con la salida del Chapita claramente se está despotenciando.

Tapia ya le ha manifestado su molestia al directorio de la sociedad anónima. Según señalan desde la concesionaria, sus críticas apuntan a que, en el papel, sólo ha llegado un refuerzo: Jean Beausejour. Esto, porque Paulo Garcés fichó para secundar al titular Justo Villar, y al fichaje de Claudio Maldonado se le resta la partida de Fuenzalida, cuya cláusula de salida era de apenas US$ 400 mil. "No contar con él sería una baja muy importante. Si se va debe llegar alguien de su nivel, o sea, un seleccionado", exigió el adiestrador.

El problema puede seguir, porque lo más probable es que esta tarde Tapia insista en repatriar a Fabián Orellana desde el Celta de Vigo. En ByN avisan desde ya que la opción es muy lejana y que, aún así, de sumarse implicaría la venta de Esteban Pavez, otro de los fundamentales para Tapia, quien ya dejó claro que a los dos elementos. "Lo ideal para mí sería tener juntos a Esteban Pavez y Orellana, sería un equipo soñado. Ese era mi requerimiento", declaró el DT la semana pasada.

Chapa está en Argentina

José Pedro Fuenzalida viajó ayer cerca de las 15 horas a Buenos Aires para someterse a los exámenes médicos y, de pasarlos, firmar un contrato por 18 meses con Boca Juniors. No se despidió de sus compañeros, ya que aún debe volver para retirar sus pertenencias de Pedreros.

"Estoy muy ilusionado con jugar en Boca. Me faltan los estudios para ser jugador de Boca y estar a disposición del técnico Carlos Bianchi. Es un paso muy importante, estoy con ganas", declaró a radio América de Argentina.

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