La "U" se queda con el clásico universitario en San Carlos y brinda valiosa ayuda a Colo Colo

Universidad de Chile se quedó con el clásico universitario en un partido que se vivió intensamente, pero que terminó con un contundente 3-0 que complicó demasiado a la UC en sus aspiraciones de darle caza al líder, Colo Colo.

El ímpetu que propuso Católica en los primeros minutos del partido se diluyó de golpe luego de una equivocación en el fondo que desniveló el partido. El local era quien tenía la mayor obligación en la versión número 178 del clásico universitario. Aún peleando con chances por el título del torneo, debían dejar los tres puntos en la precordillera para acortar distancias con el actual líder, todavía a tiro. Al frente, el equipo de Cristián Romero se jugaba no más que el orgullo, pues sus aspiraciones a una nueva estrella quedaron sepultadas hace un par de fechas atrás.

Y sí, ese era el encuentro que se comenzó a vivir en el sector oriente de la capital. En apenas dos minutos, Roberto Cereceda se ganó la primera amarilla del partido al bajar a Alvaro Ramos muy cerca del área. El "Chanchito" aprovechó su velocidad para incomodar cada vez que pudo al fondo azul, que mostraba las dudas presentes en todo el torneo. Tuvo opción en los 5', cuando trazó una diagonal y cacheteó el balón cruzado, pero la salida de Johnny Herrera salvó. El toque de la visita no resultaba, y Christopher Toselli era un mero espectador. 

Pero vendría la equivocación. Cuando Católica era más, y se quedaba con la preciada posesión por la que apuesta continuamente la "U", Fernando Cordero envió un pase atrás muy corto para el portero, y Patricio Rubio sorprendió interceptando, eludiendo y anotando. El ex Unión Española conseguía en los 19 minutos la apertura del marcador, y tomaba ventajas como el máximo artillero del campeonato, con 10 goles. Con la celebración clásica del "Matador" Salas mandaba el aviso que su olfato aún está fino, pese a la relegación a la que lo sometió el "Relojito" en las últimas semanas.

A partir de ahí, los roles cambiaron, porque la "U" ganaba en confianza, mientas que en la UC se asomaban las dudas. Con menos ideas, aparecieron las faltas que calentaron muy temprano el partido que intentaba ser manejado por un Roberto Tobar de irregular cometido, principalmente por la diferencia de criterios en los cobros.

El titubeo de los cruzados fue retratadao a la perfección en el minuto 40, cuando uno que se juega su estadía en el Mundial de Brasil, Toselli, se enredó con los pies muy lejos del área y casi ocasiona el segundo gol de la "U", de nuevo por un grueso error. Compuso después, un minuto más tarde, en un achique muy bueno sobre Rubio que buscaba el doblete.

El buen primer tiempo fue complementado con una segunda parte que ofreció muchas emociones, principalmente porque el dueño de casa buscó con insistencia el empate, y la "U" se lo permitía, cediendo mucho terreno, y endosándole la iniciativa al rival. Pudo caer el empate en varias oportunidades, con un cabezazo de Enzo Andía en un corner (52'), el ingenio de Ramos en el área (56') o la contra que terminó Darío Botinelli (62'), pero los azules mantenían la ventaja.

Pero la posesión no asegura un mejor juego, o más ocasiones de gol, y la UC comenzó a perderse sin las ideas necesarias para generar daño en campo contrario. La "U", pese a no tener tanto el balón, parecía mucho más entera, y hacía su negocio, pues mantenía ahí, al límite, su ventaja en el marcador. La solidez defensiva que ofreció la línea del fondo, en especial Osvaldo González, de gran partido.

El tiro de gracia lo daría Gustavo Lorenzetti, pero gracias a la generosidad de Patricio Rubio, que terminó cuajando un tremendo partido. En lo que fue una contra letal en los 86', el delantero enfrentó solo a Toselli, y cedió para el volante argentino que definió a arco vacío.

No sería el final del partido, pues Rubio coronaría un clásico universitario teñido de azul con un golazo de gran factura en el segundo minuto de descuento. Era el 3-0 que cerró un partido apretado, pero que terminó desnivelado completamente a favor de la visita, con su máximo artillero como gran figura.