Lo que queda de Colo Colo enfrenta una final en Belo Horizonte
Albos suman cinco bajas y dos dudosos frente a Atlético Mineiro. Jaime Valdés ni siquiera viajó con el grupo.
Colo Colo viajó ayer a Brasil. El equipo albo tenía varias caras nuevas. O, al menos, poco habituales en las convocatorias de Héctor Tapia. El Cacique está golpeado. Esta vez, la expresión no sólo alude al débil estado de ánimo de los albos, quienes con la derrota frente a Universidad Católica dejaron escapar gran parte de la opción de recuperar el título, más allá de que matemáticamente todavía puedan postular al cetro.
Las lesiones afectan a los albos. En Belo Horizonte, la ciudad en que dirimirán la clasificación a octavos de final frente a Atlético Mineiro, podrían tener hasta siete bajas. Cinco de ellos, ausentes seguros, son piezas clave en la oncena que suele utilizar Tapia. A Justo Villar, Humberto Suazo y Juan Delgado, todos afectados por problemas físicos, se sumó la determinación de no incluir a Jaime Valdés, quien presenta molestias musculares. A ese abultado grupo hay que agregar al suspendido lateral izquierdo Jean Beausejour.
El delicado panorama podría empeorar más aún. El mediocampista Emiliano Vecchio y el atacante Felipe Flores fueron considerados en la nómina, pero su presencia ante el equipo del Gallo es incierta.El transandino presentó problemas físicos antes del encuentro ante los cruzados y ni siquiera fue utilizado por Tapia en la caída ante la escuadra de Mario Salas. En tanto, Flores fue uno de los jugadores que realizó un mayor desgaste en el choque ante el equipo estudiantil, en el que comenzó como volante creativo, función en la que se vio incómodo, al punto que, poco después de iniciado el encuentro, fue relevado por Esteban Paredes.
El arquero paraguayo,había jugado cuatro de los cinco encuentros. En México, en la victoria sobre Atlas, el arco albo fue defendido por Paulo Garcés.
Humberto Suazo había llegado como el principal refuerzo para la actual temporada. Sin embargo su nivel ha distado de las expectativas de los hinchas, más allá de que Tapia haya salido a defender su utilidad táctica. Para colmo, a fines de marzo, en el partido frente a Unión La Calera, Chupete sufrió la desinserción parcial del tendón aductor izquierdo, dolencia que podría apartarlo del equipo hasta por seis semanas. Es decir, se perderá el resto del torneo local. En la Libertadores había disputado los primeros tres partidos. En todos fue titular y el técnico ni siquiera lo sustituyó. Le marcó un gol de penal a Independiente Santa Fe, en la caída en Colombia.
La participación de Juan Delgado también había sido periódica. Fue titular en tres encuentros, aunque en todos fue reemplazado: en la victoria sobre Mineiro, en la derrota en Colombia y el triunfo ante Atlas, en Santiago. Además, ingresó en los 66' del revés ante Santa Fe en el estadio Monumental.
Valdés fue titular en los cinco choques coperos. En tres de ellos fue reemplazado: en la derrota en Colombia, en los 69'; en Santiago, ante Atlas, en los 79' y en Guadalajara, en los 78'. Pajarito, pieza clave para los albos, nunca pudo recuperar el nivel que tuvo hasta antes de lesionarse en la gira de la Selección por Europa.
Mientras, Beausejour sumaba cinco encuentros desde el inicio. Nunca fue reemplazado y había disputado los 450 minutos de Colo Colo en la Copa. Sin embargo, las dos amonestaciones que recibió frente a Independiente Santa Fe, en Bogotá y Santiago, interrumpirán su asistencia perfecta y le darán una chance a Luis Pavez.
Flores había jugado como titular en los tres primeros duelos. Sólo una vez estuvo en la cancha en el partido completo. Contra Atlas, en México, sólo disputó un minuto.Frente a Santa Fe, en Macul, ni siquiera fue considerado. Vecchio, quien perdió presencia con la llegada de Suazo, suma tres apariciones desde el primer minuto. En los otros dos ingresó desde la banca. El transandino no anotó goles.
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