Los detalles de la trama secreta que devuelve a Pizarro a la "Roja"

Lo que para Marcelo Bielsa y Claudio Borghi había resultado una tarea imposible, finalmente Jorge Sampaoli sí pudo conseguirlo. El casildense, después de varios intentos, logró el retorno de David Pizarro a la Selección chilena, tras casi ocho años de ausencia.

Pese a que todavía ninguna de las partes lo ha confirmado públicamente, ya es un hecho de que el mediocampista aparecerá en la nómina de jugadores que militan en el extranjero que dará el técnico el próximo 21 de mayo. Incluso, el mediocampista de Fiorentina se integraría a los entrenamientos el miércoles, cuando el seleccionador chileno pretende contar con los futbolistas que militan en Italia e Inglaterra.

Por ahora, la única ratificación surgió desde el club viola. "Estamos contentos y orgullosos de que David fuera citado a su Selección", dijo su director deportivo, Daniele Prade, a El Mercurio.

Pese a que en dos ocasiones anteriores Sampaoli había fallado en su intento de reunirse con Pizarro, finalmente el encuentro se produjo hace algunos días en Florencia. Dicha conversación, que sólo conocían Felipe Correa, gerente de selecciones, y Sergio Jadue, resultó clave para que el casildense pudiera convencer al mediocampista para regresar a la "Roja".

A diferencia de 2009, cuando el Sifup intercedió sin éxito por su vuelta a la Selección a pedido de Harold Mayne-Nicholls, esta vez fue el propio técnico nacional el que se jugó una última carta, en silencio, quizás entendiendo que esa era la forma de agradar al futbolista.

SIN FILTRACIONES

No fue casualidad el hecho de que el encuentro entre el DT nacional y el volante fuera casi en secreto. La idea de Sampaoli era precisamente evitar las filtraciones e informaciones que salían en la prensa cada vez que se iba a juntar con Pizarro.

La primera vez que Sampaoli lo fue a buscar a Italia, en diciembre pasado, el jugador tuvo que venir de urgencia a Chile por la muerte de su hermana. Incluso, Jadue se trasladó hasta Valparaíso para conversar con el volante, un hecho que molestó al futbolista.

El siguiente intento fue en febrero, en el centro de entrenamiento de Fiorentina, sin embargo, otra vez Sampaoli se quedó con las ganas. El mediocampista no apareció por el lugar e, incluso, se despacharía una frase muy crítica hacia el grupo que integraba la Selección: "No voy a actuar como niñera con niños de 19 años".

Allí muchos pensaron que las chances de convencer a Pizarro se esfumaban, pero el casildense no bajó los brazos. Sus deseos por contar con el porteño sólo podrían ser apagados si escuchaba de boca del propio futbolista y cara a cara su deseo de no regresar. Por ello gestionó un tercer encuentro, el que se concretó. 

Sampaoli le expuso sus puntos de vista, le detalló lo que tenía en mente para el plantel y principalmente para él. En contrapartida, el jugador le resumió las razones de su alejamiento y pese a tener la mejor impresión de su persona, quedó en pensar la convocatoria. Días después llegaría el sí.