Los panes de Pascua "alternativos" se toman la capital
En Santiago se pueden encontrar sin gluten, sin leche, sin azúcar o sin huevo. Veganos y personas que no consumen gluten son los principales beneficiados.
El pan de Pascua es el tradicional queque navideño, que en su versión chilena incluye frutos secos (como almendras y nueces), frutas confitadas y esencias como canela o nuez moscada. Tan famoso es, que en la capital existen rankings y catas para determinar el mejor.
Pero el pan de Pascua también incluye ingredientes que dificultan su consumo a ciertas personas. Por ejemplo, huevos, leche y mantequilla lo hacen incomible para los veganos. La harina de trigo, que tiene gluten, complica a los celíacos. Pero también existen alternativas para ellos en Santiago.
La pastelería Dulcelia reemplaza la harina de trigo por una hecha especialmente por sus maestros pasteleros con almidón de maíz, almidón de mandioca y harina de arroz, que no contiene la proteína prohibida para los celíacos. Para lograr el volumen, usan levadura o polvos de hornear. "Antes hacía pan de Pascua sin leche para intolerantes a la lactosa y sin azúcar para diabéticos, pero era complicado hacer tantos tipos. Ahora hago uno que no lleva ninguno de esos ingredientes y les sirve a todos por igual. La leche la reemplazo con agua, el azúcar con esencias naturales y los huevos los dejo fuera", dice Beatriz Canales, dueña del local.
En el supermercado orgánico La Chakra también tienen pan de Pascua sin gluten, mientras que el café VOP, en el barrio El Golf, ofrece esta alternativa en tres tamaños: 100, 200 y 500 gramos. "Existe más conciencia de la necesidad de alimentarse sanamente, más allá de las personas que no coman gluten", dice Alejandra García, chef y dueña.
SIN LECHE
Los veganos no consumen ningún producto de origen animal, incluidos huevos y leche. Hoy existen alternativas para ellos. El café vegano Bhakti tiene un pan de Pascua elaborado sin esos elementos y los vende a pedido. El encargado es Gourendo, un hare krishna que también deja fuera la tradicional fruta confitada, para evitar sus colorantes artificiales. En cambio, usa semillas de maravilla y amapola, y pasas. La harina que utiliza es de trigo y centeno, molida e integral. El azúcar, rubia y orgánica. "En vez de leche, simplemente uso agua”, asegura.
El restorán Soju, en el centro, también hace pan de Pascua vegano a pedido. Los huevos quedan fuera y la leche es reemplazada por leches de almendra y soya. Valen entre cuatro y seis mil pesos. "Aunque son un poco distintos al pan de Pascua, estas versiones veganas cumplen con lo más importante para nosotros: protegen a los animales y dan pie para reunirnos en torno a una comida compartida en estos días de fin de año", comenta Marianela Lagos, vegana hace cuatro años.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.