Municipalidad de Santiago: restringir mendigos en Plaza de Armas "no va en la línea de lo que la alcaldesa Tohá piensa"

A través de un comunicado, la Municipalidad de Santiago se refirió a la propuesta de ordenanza municipal sobre la Administración y usos de la Plaza de Armas de Santiago, cuya norma que restringe el acceso de mendigos al lugar público, causó polémica.

Según aclaró el municipio, el documento es una propuesta de la Dirección Jurídica, que no ha sido visada por la alcaldesa Carolina Tohá y debe ser discutida y zanjada por el Concejo Municipal.

"Durante la preparación del documento, se realizaron varias reuniones con la edil para abordar los temas que incluiría la nueva norma, encuentros en los que la idea de prohibir los actos de mendicidad no estuvo en tabla por no ser un artículo nuevo", dice el comunicado.

Según explica, dicha prohibición es parte de varias normativas antiguas del municipio  que regulan los espacios públicos y que la alcaldesa pretende reformar. Además indica que Tohá   ya pidió a la Dirección Jurídica aclarar este punto, "para que la propuesta final de ordenanza sea acorde al trabajo que está realizando el municipio en materia social".

"Es necesario ser enfáticos en que dicha norma no va en la línea de lo que la alcaldesa Tohá piensa, ni en el modo en que esta administración ha trabajado y sigue trabajando con las personas en situación de calle. Ejemplo de ello es el Centro de Día, inaugurado hace algunos meses, que tiene como objeto acoger a personas que mendigan en la Plaza de Armas, en el casco histórico y los espacios públicos de Santiago", manifiesta el escrito.

El documento emitido por la municipalidad, asegura que "no ha sido jamás el ánimo de esta administración establecer ningún tipo de acto discriminatorio, muy por el contrario, trabajamos por hacer de esta una comuna inclusiva".

Además indica que, "por lo anterior, al recuperar un espacio público, el objeto es que dicha reforma sea integral y que no signifique restringir el acceso de personas a la Plaza de Armas que es patrimonio de todos los chilenos, sino simplemente reforzar la normativa respecto del uso del espacio público y limitar aquellas externalidades o incivilidades que por años han estigmatizado el lugar y  que pueden generar molestias a las millones de personas que visitan o transitan por esta plaza anualmente".