ONU denuncia a Corea del Norte de imponer castigos más severos para desertores

Corea del Norte está imponiendo castigos más severos contra quienes tratan de escapar del país, una señal que las condiciones generales de derechos humanos en el país siguen pésimas, dijo hoy un funcionario de la ONU.

"La actual situación es sumamente grave", dijo Vitit Muntarbhorn, un profesor tailandés que investiga los derechos humanos en Norcorea para la ONU, aunque nunca se le ha permitido el ingreso al país.

Corea del Norte ha sido considerado desde hace tiempo como uno de los peores violadores de derechos humanos en el mundo. El país tiene unos 154.000 prisioneros políticos en seis grandes campos de detenciones, de acuerdo con estimados del gobierno surcoreano.

Pyongyang niega la existencia de esos campos y a menudo reacciona furiosamente a las críticas extranjeros de la situación de los derechos humanos.

En un informe el año pasado, Vitit describió una larga lista de violaciones de los derechos humanos en Norcorea, incluyendo ejecuciones públicas, tortura, vigilancia extrema estatal y el uso extendido de monitoreo de conversaciones telefónicas, además del control gubernamental de los suministros de alimentos, la persecución de los ciudadanos que tratan de escapar, el abuso de mujeres y niños y los secuestros de extranjeros con fines de espionaje.

Vitit le dijo a reporteros el viernes que durante su término como el principal funcionario de la ONU para derechos humanos en Corea del Norte, ha habido lo que calificó de mejoras nominales, como revisiones de la ley.

"Pero en términos de substancia, ha habido graves transgresiones y violaciones en los seis años en que he monitoreado la situación", dijo al concluir una visita a Sudcorea para reuniones con funcionarios del gobierno y desertores norcoreanos.

"Ahora recibimos reportes de severos castigos, prisión plena y familiares hostigados sobre la base de castigo colectivo", dijo, refiriéndose a personas que tratan de dejar el país o escapan, pero son devueltas.