Perú: Campesinos toman central hidroeléctrica y retienen a 13 policías

Los manifestantes demandan la compra de fertilizantes, avaluados en 300 dólares, que la empresa dueña de la central se niega a pagar.<br />




Alrededor de 6.500 campesinos del distrito de Paucartambo, en la región peruana de Pasco, se tomaron las instalaciones de la central hidroeléctrica de Yuncán y, hasta el momento, retienen a 13 policías para exigir la compra de fertilizantes.

"La central hidroeléctrica ha dejado de operar en un 50 por ciento y actualmente se encuentran 13 policías secuestrados", informó el gerente de Asuntos Corporativos de la Empresa Enersur, subsidiaria de la belga Tractebel, Álvaro Valdez, a Radio Programas del Perú.

El portavoz agregó que la comunidad campesina de Paucartambo exige la compra de fertilizantes para sus campos de cultivo con recursos del Fondo Social, que la empresa debe destinar por ley a obras en las poblaciones vecinas.

Sin embargo, Valdez explicó que "el problema es que este fondo debe usarse en forma responsable, haciendo proyectos productivos" y la compra de fertilizantes no está considerada entre sus opciones.

Los comuneros de Paucartambo, a más de 300 kilómetros al este de Lima, convocaron a un paro el pasado jueves y el viernes radicalizaron la medida con el ingreso en la central de Yuncán e impidieron la salida de los policías destacados en la zona para brindar seguridad.

El alcalde de Paucartambo, Clever Meléndez, declaró a la radio Cadena Peruana de Noticias que la compra de fertilizantes pedida por los comuneros representa un desembolso de 1.000 soles, unos 300 dólares.

Meléndez dijo que la adquisición fue aprobada en las últimas horas por la municipalidad y el fondo social de Yuncán, pero que necesitan las garantías de seguridad para comunicar personalmente la decisión a los comuneros.

El director de la Policía Nacional del Perú, Miguel Hidalgo, confirmó a CPN que los agentes "están retenidos" pero ilesos y en posesión de sus armas, y que la central está funcionando parcialmente.

Hidalgo anunció que viajará hoy a la zona para "darle solución a un problema que va más allá de un tema policial", en coordinación con las autoridades locales, la empresa de energía y los campesinos.

El director de la Policía informó que recibió esa orden del Ministerio del Interior para evitar que se involucre a la institución en otra protesta social.

El Gobierno peruano vivió su peor crisis política en junio pasado, cuando envió a un contingente policial a desalojar una carretera tomada por indígenas amazónicos y se desató un enfrentamiento en varios lugares que dejó 24 policías y 10 civiles muertos.

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