Pizarro notifica su decisión de competir por la presidencia de la DC

Senador encabezaría la lista de la disidencia en las elecciones del 29 de marzo próximo. Legislador, eso sí, podría liderar lista de consenso si prospera un acuerdo con Gutenberg Martínez.




Como gran parte del debate del consejo nacional de la DC del lunes se centró en la decisión de invitar a los militantes que participan de Fuerza Pública para que definan su domicilio político, hubo otra determinación que pasó casi inadvertida: se fijó el lunes 23 de febrero como el plazo tope para inscribir las listas que competirían por la presidencia del partido.

La oficialización de la fecha activó inmediatas e informales reuniones entre las distintas tendencias internas que aspiran a quedarse con la cúpula democratacristiana. En uno de estos diálogos se cristalizó una decisión que se venía amasando hace semanas. El senador Jorge Pizarro notificó a sus cercanos que competirá por la presidencia.

El parlamentario dio el paso luego de una seguidilla de reuniones con los representantes de su sector -la denominada disidencia-  en las que precisamente se discutió cuál de los dirigentes que conforman el grupo -entre ellos el presidente de la Cámara, Aldo Cornejo, y la diputada Yasna Provoste-era el más idóneo para liderar al sector en una eventual contienda.

Ya el lunes en la mañana, antes de la sesión del consejo, en una reunión en la sede del Congreso en Santiago, Pizarro les había adelantado a los demás miembros de la disidencia que daría la pelea.

Ahora sólo falta definir la fecha del anuncio oficial de la candidatura y los nombres que lo acompañarían en la nómina para luego iniciar, durante enero, una gira por el país.

Todas esas determinaciones, eso sí, están condicionadas por la posibilidad de que el nombre de Pizarro finalmente se transforme en la cabeza de una lista de consenso.

Esto porque en paralelo a las conversaciones de la propia disidencia DC, han existido otras con el sector que lidera el ex diputado y ex presidente del partido Gutenberg Martínez.

El ex parlamentario, que ha recibido formales peticiones para que compita por la mesa de la colectividad, se ha abierto en los últimos días a evaluar su apoyo a una directiva de consenso liderada por Pizarro.

Sus cercanos explican que si bien han sido reiteradas las solicitudes para que dispute la presidencia, Martínez preferiría mantenerse como consejero nacional y así aprovechar la libertad que le otorga dicho sitial. De esta manera podría continuar con su discurso de defensa de la identidad DC y, en algunos casos, crítico del gobierno y sus reformas.

Con todo, para que prospere el apoyo de Martínez a Pizarro va a resultar crucial el espacio que tengan algunos de sus cercanos en el elenco que acompañe al senador.  En este punto se plantea que para que el consenso sea realmente representativo, al menos, una de las vicepresidencias debería quedar en manos de un miembro del círculo de Martínez. Asimismo, la secretaría nacional de la colectividad. Este cargo, después del de presidente, es el de mayor visibilidad e importancia, ya que, entre otras materias, se encarga de coordinar los procesos electorales.

Desde La Moneda ya se ha planteado que la candidatura que más simpatía les genera es precisamente la de Pizarro. El legislador ha mantenido una postura de apoyo a las reformas del gobierno y sostiene una fluida comunicación con el ministro de Interior, Rodrigo Peñailillo.

Otro de los espacios en la lista sería para el ala "Chascona" de la colectividad, que representa la sensibilidad más de izquierda de la DC.

Desde otro sector del partido se ha planteado la posibilidad de que sea el senador  Andrés Zaldívar quien lidere una nómina de consenso. De hecho, así lo explicitaron el fin de semana los diputados Sergio Espejo, Claudio Arriagada y Jaime Pilowsky. Pero con la determinación de Pizarro, la apuesta por Zaldívar no se concretaría.

Quien también ha sido parte de las tratativas es el diputado y actual vicepresidente de la mesa de Ignacio Walker, Fuad Chahín.

El parlamentario, en todo caso, ha transparentado su intención de disputar la presidencia de la colectividad, por lo que de no haber cabida en la plantilla de Pizarro, se transformaría en su competidor.

La posible contienda quedó fijada para el domingo 29 de marzo.

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