"Somos el único grupo de este nivel que habla sobre lo que nos rodea"

El artista habla de los alcances y conflictos de su rol como vocero social y adelanta los cuatro shows que vienen a dar a Chile.




Las biografías y gacetillas promocionales etiquetan a René Pérez Joglar (33) como "Residente". "Pero en Chile sólo soy 'Visitante'", se rebautiza una de las mitades de Calle 13, cuando lo interrogan sobre la actualidad política y social del país. "Puedo hablar sólo como artista, porque no vivo en Chile y tendría que comprar allá leche y pan, todos los días, para hacerlo en profundidad", remata.

El asunto es relativo: en el último año, el cantante se ha convertido en una suerte de residente no geográfico de la realidad local. Su dúo, que completa su hermanastro, Eduardo Cabra, el auténtico "Visitante", se alza hoy como una de las bandas latinas más populares en el país y ha fortalecido un creciente vínculo con sus fans. Vinieron en febrero al Festival de Viña del Mar y ahora retornan con cuatro conciertos: el 2 de septiembre, en Puerto Montt; el 3 en Concepción, y el 5 y 6 en el Movistar Arena de Santiago, con una función ya agotada y el plan de totalizar 28 mil personas en la capital. Además, el vocalista se ha mostrado como uno de los voceros más fervorosos del movimiento estudiantil, publicitando y apoyando sus actividades a través de twitter. "Sabía que teníamos seguidores, pero no me esperaba nada de lo que está pasando", subraya el puertorriqueño, al teléfono desde México.

Para él, todo nació precisamente en la última cita en la Quinta Vergara, en esa noche que enfilaba hacia la madrugada y que lo llevó a cantar con Camila Moreno e Inti-Illimani una intensa versión de Latinoamérica, para luego exigir que los animadores no salieran a entregarle premios. "Cada país ha tenido su tiempo en conectarse con lo que hacemos realmente. Los argentinos fueron los primeros que entendieron nuestra propuesta, ya que nos vinculamos con ciertas actividades en la Plaza de Mayo, donde no todos participaban, pero nosotros sí, porque lo hacíamos por amor y revelamos un lado de la banda que no todo el mundo conocía. En Chile ayudó mucho lo de Viña, al invitar y dar poder a los grupos chilenos. La idea no fue quitarle poder al público, sino que sacar al evento de todo su estilo de alfombra roja. Eso ayudó a conectarnos con otro tipo de gente y que vieran la honestidad con la que trabajamos", dice el cantante.

Uno de los instantes más recordados fue cuando pedía que los animadores no volvieran.
Es que se les da un poder excesivo a los premios, por encima del público y de la misma música. Quería demostrar que uno podía tener éxito sin ganarse una Gaviota de Oro. Todo se centraba en eso y se perdía la realidad: que la gente tenga el poder.

¿Regresaría a Viña?
No lo sé. Pero no lo haría porque no me guste el Festival, ya que es muy bonito. A pesar de que es un evento internacional, estaría chévere que fuera un requisito que mezclaran artistas internacionales con nacionales. Que fuera una obligación. Ustedes tienen tan buenos artistas que deberían ser más reconocidos de lo que son, aunque no recuerdo todos los nombres. Pero si no vuelvo a Viña es para darle la oportunidad a otra gente.

Otro lazo con Chile es su apoyo a las marchas estudiantiles. ¿Qué lo identificó con el movimiento?
Todo lo que he opinado sobre el tema viene desde el punto de vista de un artista. Pero lo mío no es una denuncia ni nada, simplemente los estoy apoyando desde afuera, porque sé que no soy chileno y no quiero ofender a nadie ni que piensen que vengo desde el extranjero a meterme en cosas de su país. Soy bien cuidadoso con eso y doy mi opinión porque me la piden. Además, conecté con lo que está pasando allá porque en Puerto Rico sucede lo mismo, aunque la diferencia es que Chile es un país de una sola bandera, no como nosotros, que somos una colonia. Y toda la educación pública debería ser gratuita, aparte que motive a los jóvenes a estudiar, no al contrario. Hasta deberían pagarles a los jóvenes para que estudien; esto debería ser al revés.

¿Piensa hacer algo con los estudiantes?
Me gustaría. Los conozco y he estado en contacto con Giorgio Jackson y Camila Vallejo, por Twitter. Estaría chévere escucharlos y capturar algo de lo que ellos tengan que decir.

¿Es difícil ser creíble con su discurso y a la vez trabajar para un sello multinacional y ligarse a grandes marcas?
Sí, es súper difícil, aunque lo hemos mantenido muy bien. Es una estrategia. Todo el mundo tiene su manera de llevar el mensaje y la nuestra, hasta ahora, ha funcionado, porque somos el único grupo de este nivel que habla sobre lo que nos rodea, a la escala en que lo hacemos: en programas importantes, en los Grammy, tenemos el auspicio de Adidas. Entonces, lo que para la gente es contradictorio, para mí es una herramienta.

Lo dice su tema Calma pueblo: "Adidas no me usa/Yo estoy usando a Adidas".
Claro, estoy usando todas las herramientas que tengo a mi alrededor para poder llevar el mensaje y no voy a dejar de utilizar nada, ¿me entiendes? No le voy a dar ventaja a nadie ni a nada. Y eso me ha costado, ha sido duro mantener nuestro discurso en el ambiente de la música, porque es doblemente contra la corriente. Sería fácil no agarrar ningún auspicio y quedarse en un espacio seguro, alternativo y un discurso "real", pero le dejas de llegar a la gente y te comunicas con el mismo círculo que piensa igual que tú.

¿Qué cree de los que acusan cierto populismo y que se ha convertido en un artista que siente la compulsión de opinar de todo?
Es que, por ejemplo, el video más importante que vamos a hacer ahora es la canción Latinoamérica y el dinero me lo está dando Adidas, no lo está pasando ni la Unesco ni la Unicef ni nadie. Por eso digo que ellos no me están usando, sino que yo los uso a ellos. Hay que ser claro. Al final, toda la gente que critica va a un inodoro que hizo una fábrica que explotó a mucha gente. Todo hoy tiene nombre y apellido, es muy ridículo y naif estar contra el sistema y creer que estás fuera de él. Porque nadie se salva. En una montaña en el Cuzco vi que tenían una radio, la misma que, por ejemplo, contamina. Si fuera por eso, entonces no puedes ni caminar por el piso, porque sabemos quién pone la vereda y el suelo por donde transitas. Entonces, hay que saber usarlo a favor, esa actitud de estar en contra de todo ya pasó.

¿Cómo ve el futuro del grupo?
Cada vez vamos a estar más conectados con la gente y nuestro trabajo va a seguir creciendo. Y vamos a seguir juntos, no tenemos planes solistas, pero si mi hermano Eduardo quiere hacer algo paralelo, está muy bien, puede pasar. Pero por ahora, no creo que Calle 13 se separe.

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