Tormenta terminó por cerrar Lolla Chicago

No será un día que los organizadores de Lollapalooza Chicago recuerden con cariño. Las cosas salieron mal varias veces y se cerró de la peor forma posible.

Desde temprano, la edición de Chicago -la más grande a nivel mundial- iniciaba sus 4 días de música repitiendo la dinámica que instauró en 2016, de realizarse de jueves a domingo.

Con siete escenarios, el festival, que durante el fin de semana contará con presentaciones de artistas como The Killers, Blink 182, The xx, Chance the Rapper y Arcade Fire, comenzó con nubes de tormenta en el cielo, que tuvieron en permanente alerta a la organización, que llamaba al público a estar atento y a una eventual evacuación del recinto.

Pero los problemas no comenzaron con el clima, sino con Liam Gallagher. La ex voz de Oasis apenas alcanzó a interpretar 4 canciones cuando abandonó el escenario, ante la sorpresa de su banda, mientras el público abucheaba. Más tarde explicaría que sentía un malestar en su garganta desde un concierto en la noche anterior. En el otro extremo del Grant Park, el trío de rap Migos también presentaba inconvenientes. El conjunto, que convocó la audiencia más numerosa de la tarde, subió al escenario con casi 40 minutos de retraso, luego de que el vuelo que los traía a Chicago se retrasara por las tormentas.

Cuando llegaron los números principales de la noche, la lluvia comenzó a subir de intensidad hasta transformarse en tormenta eléctrica y todo terminó casi tan rápido como empezó. La neozelandesa Lorde apenas tocó 3 canciones cuando la producción subió al escenario y le dijo que no podría seguir. Era el momento de evacuar. Lo mismo con Muse, que se presentaba en otro lugar del parque. Cien mil personas debieron abandonar el lugar, mientras Lollapalooza anunciaba por redes sociales que hasta ahí llegaba todo por el jueves, para la frustración de tanto músicos como asistentes. No fue el mejor de los comienzos.