Uno a Uno de Chile: Un equipo que luchó hasta el final y sucumbió en los lanzamientos penales

Claudio Bravo: Un primer tiempo sólido, salvo una salida muy arriesgada. Confirmó su buen momento y en el segundo tiempo y en el alargue mantuvo su buen nivel y se transformó en una figura extraordinaria, con tapadas fuera de serie.

Francisco Silva: Le costó mucho tomar la marca de Neymar, pero a quién no en este Mundial. Tuvo problemas en la salida, lo que generó varios problemas a la zaga nacional. Su amarilla fue injustificada. En el segundo tiempo subió su nivel superlativamente.

Gary Medel: Si jugó al 50 por ciento, es mucho. Se le notó en algunas pelotas en que se le vio con dudas. Aún así, mostró el coraje que se le reconoce en todo el mundo. Arriesgó una lesión grave y estuvo a la altura del partido. Salió ovacionado en el segundo tiempo del alargue, como héroe, porque ya no daba más.

Gonzalo Jara: Un partido correcto, pero no en el nivel que mostró ante España, su mejor presentación en esta Copa. Tuvo poca fortuna en el autogol del 1-0, pero es cierto que David Luiz lo desplazó con mucha facilidad. También fue un baluarte también a la hora de defender.

Mauricio Isla: Otra vez quedó en deuda. Lento para tomar decisiones y muchas de ellas, erradas. No colaboró con Silva en la contención de Neymar. Quizás fue el más débil de la Selección en un partido donde se permitían puntos bajos. El "Huaso" no llegó a la Copa.

Marcelo Díaz: Falló en lo que más se le pide, que es la distribución de la pelota. Sus errores pudieron tener consecuencias más graves. Al menos tuvo el deseo de siempre pedir el balón y terminó subiendo su nivel con pundonor. En la recuperación se vio mejor.

Charles Aránguiz: Entendió cómo era el juego. Se desplegó por toda la cancha y fue apoyo para Vidal y Sánchez. De los puntos más altos en la selección nacional. Además de fútbol, mostró mucha personalidad. Terminó extenuado, como todos sus compañeros.

Arturo Vidal: Un partido partido para guapos y Vidal es uno con letras mayúsculas. Jugó con mucho dolor en la rodilla, pero fue al suelo, quitó y generó peligro. Sampaoli lo mandó a jugar casi como delantero en ocasiones. También salió porque su rodilla derecha no dio más. Un héroe.

Alexis Sánchez: Se puso el equipo al hombro en ofensiva. Marcó el gol, pero también generó muchas faltas y dio pases que abrieron la defensa de Brasil, muchas veces jugando como el enganche. El mejor de la Roja, junto Arturo Vidal, pese a que terminó sin piernas, por todo el esfuerzo que realizó.

Eduardo Vargas: Otro partido muy bajo para el delantero. Se esperaba más del goleador en el proceso de Sampaoli. Se retiró en el segundo tiempo, después de un duelo en que sólo destacó por su centro que generó el gol de Sánchez.

Felipe Gutiérrez: Entró para darle más fútbol al medio y terminó siendo un obrero más. Su esfuerzo debe ser valorado, en un cuadro donde la parte final del compromiso apostó a contener. Hizo una buena labor.

Mauricio Pinilla: Entró a pelearlas todas y ganó muchas. Laborioso, fue un alivio en momentos de mucho apremio. Jugó menos minutos que el resto, pero también acabó cansado. Pudo transformarse en una leyenda, pero su remate en el final del alargue dio en el travesaño.

José Rojas: Entró en lugar del averiado Gary Medel. Y cumplió en los pocos minutos que jugó. No falló nunca, especialmente en pelotas aéreas. Bien.