Son muchas las marcas y organizaciones que han puesto su foco en el empoderamiento femenino. Cada una de ellas ha observado las demandas de los movimientos de mujeres, logrando conectarse con el sentir social para así ser un aporte en este cambio de paradigma.
A partir de ese interés por conocer realmente qué piensan los consumidores de su contenido, es que muchas de estas entidades han realizado una serie de estudios que apuntan a un solo problema: la inseguridad que generan los estereotipos en las personas.
Así, según la investigación realizada en 2019 por Avon y Fundación Avon (con aportes de Oxfords Economics), reveló que un 80% de las mujeres encuestadas considera que las marcas de belleza ponen presión en ellas para ser perfectas.
Hay otros estudios que, dentro de la misma línea, aseguran que los estereotipos tradicionales impuestos por la sociedad, a través de los medios y la publicidad, impactan directamente en la autoestima de las mujeres, llegando incluso a cuestionarse su rol en la sociedad o si hacer o no alguna actividad.
De esta forma, las marcas de belleza están reevaluando su forma de pensar sus campañas, dejando atrás ese concepto de belleza tradicional impuesto por décadas en los medios, para dar paso a uno real que celebra la diversidad de los cuerpos, pieles y, por sobre todo, de personas. Avon es una de las marcas que hace tiempo se atrevió a derribar los estereotipos clásicos para reforzar el poder de las mujeres.
De hecho, su última campaña, llamada #DaleColor, hace un llamado a romper con esas creencias que por años han estado presentes en la construcción de la identidad de las mujeres, como por ejemplo, que las niñas deben vestir de rosado, que todas son princesas, que deben cumplir con determinados patrones físicos o que el maquillaje es solo para mujeres.
Dentro de este concepto de belleza sin estereotipos ni etiquetas, Avon celebra las diferencias y de manera optimista y luminosa, invitando a usar colores en el maquillaje, a no esconder nada, sino que mostrar y destacar el sello que hace única a cada persona.
5 normas que se han derribado en la industria de la belleza en 2020:
1. El maquillaje y las rutinas de belleza y cuidado facial no son solo para mujeres:
Hoy son muchos los hombres que cuidan su piel y se atreven a usar maquillaje en los más diversos colores y formas. Tampoco hay un estilo definido para ellas o ellos, todos pueden maquillarse como y cuando quieran, porque los juicios quedaron atrás.
2. Las pecas ya no se esconden detrás de gruesas capas de base y polvos compactos:
Al contrario, se aceptan, se muestran y se potencian con maquillaje colorido, ya sea en la zona de los ojos o en los labios.
3. Ya no existen reglas para maquillarse de cierta forma en el día o en la noche, o incluso según la ocasión:
Hoy día los colores se abren paso a toda hora del día. De ahí, el auge de delineadores de colores vibrantes o glitter, máscaras de pestañas de colores, labiales que salen del rojo, el marrón y el rosado, y sombras que abarcan toda la gama cromática.
4. Tampoco se ocultan las cicatrices:
Movimientos mundiales como el Body Positive, que invitan a visibilizar todas las formas de belleza, han hecho que muchas marcas dejen de ocultar las cicatrices, estrías, celulitis, manchas y marcas de acné en sus campañas publicitarias.
5. El maquillaje no solo se trata de belleza y potenciar los rasgos de cada persona:
Hoy día es una forma de expresión que sirve para alzar la voz, para decir que no se siguen patrones establecidos y para manifestar la verdadera identidad y forma de ser que hay dentro de cada persona.