Handmade (en Chile)

Una nueva generación de diseñadores le está dando renovado impulso a la artesanía nacional. Rescatando los antiguos oficios con una estética moderna y privilegiando un estilo de producción a pequeña escala, deliberadamente alejado del retail, desarrollan piezas bellas, únicas y nobles que se instalan en el perfecto espacio entre el arte y el objeto utilitario. La factura local tiene un correlato global, pues venden sus creaciones online en el mundo entero y participan activamente del bullente movimiento handmade que, como gesto contracultural, hoy brota en los cinco continentes. Aquí, tres dignas representantes.




Paula 1138. Sábado 18 de enero de 2014.

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Las diseñadoras chilenas Francisca Aldea (28), Karen Barbé (36) e Ignacia Piriz (32).

Aburridas de dedicar su tiempo y capacidad creativa a la producción en masa y al diseño impersonalizado, las diseñadoras chilenas Francisca Aldea (28), Karen Barbé (36) e Ignacia Piriz (32) decidieron, cada una por su cuenta, dejar a un lado sus monótonos trabajos y se pusieron a crear objetos con sus propias manos. Son parte de la tendencia handmade o crafty: diseñadores de todo el mundo han dejado de lado sus computadores y han vuelto a dibujar con lápiz y papel. Personas comunes han decidido aprender a hacer las cosas y publicar cómo las realizan en tutoriales online. Y marcas de diseño han optado por rescatar el valor del trabajo artesanal. En pinterest, instragram y la mayoría de los blogs de referencia en diseño y decoración, salta a la luz que ahora lo que la lleva es hacer y crear productos con las propias manos.

El rechazo a la producción masiva, la revalorización de los oficios tradicionales, el cuidado por el medio ambiente, el valor de los estético y la búsqueda de piezas únicas son los principales atributos de esta tendencia, los mismos con que sintoniza una comunidad cada vez más numerosa de compradores hastiados de la producción en serie y de los símbolos de estatus que han construido las marcas.

De la mano de la tecnología y las redes sociales, que cada vez hacen más fácil compartir imágenes y comprar online, el handmade se ha viralizado por el mundo a una velocidad abismante en un movimiento global del que Chile no ha quedado al margen. Como muchos otros diseñadores nacionales, estas tres mujeres apostaron por esta nueva manera independiente de crear y están empujando al diseño chileno a una nueva dimensión.

Karen Barbé / Con aguja e hilo

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El bordado es un oficio que heredó de su madre. Desde los 10 años, la diseñadora Karen Barbé (36) dedicó gran parte de su tiempo libre a dibujar y diseñar tejidos con aguja e hilo.

Al principio lo vio como un hobby. Pero, en 2008, mientras miraba a través de internet el trabajo que realizaban otras personas encantadas con el oficio del bordado y el diseño contemporáneo, se empezó a dar cuenta que había una clara tendencia de volver a lo hecho a mano, reunida en torno al movimiento handmade. A fines de ese año –y en paralelo a sus trabajos como diseñadora gráfica en marcas de vestuario y departamentos de marketing– abrió un blog para compartir sus creaciones y ponerse en contacto con esta comunidad global. Partió dibujando patrones para estampar telas y con ellas diseñó bolsos y sábanas. Bordó toma ollas, cuadros y mantas. Y, produciendo cada una de las fotos en una atmósfera en la que incluía diferentes objetos de decoración, comenzó a subir fotografías de su trabajo. Su objetivo: mostrar cómo se podía combinar lo hecho a mano con una estética moderna. El resultado fue un éxito, y a los pocos meses del lanzamiento la contactaron de la revista Martha Stewart Living para publicar uno de sus diseños.

Dedicada por completo a su blog, actualmente Karen realiza trabajos a pedido que en su mayoría son clientes de Estados Unidos, Australia y Europa. Sus productos han sido publicados en revistas como la australiana Frankie, Nylon Corea y H Magazine y durante todo el año dicta cotizados cursos de bordado en su taller en Vitacura. "Mi trabajo y mi blog busca comunicar el valor que tiene lo hecho a mano de manera atractiva. Cuando enseño a bordar lo primero que les explico a mis alumnas es que no aprenderemos a hacer las clásicas rosas o esos patrones que uno asocia a la abuela. Más que productos en particular, lo que me interesa es mostrar e incentivar un estilo de vida handmade, en el que uno es capaz de hacer muchas cosas. Me siento parte de un nuevo movimiento global de nuevos artesanos que cada vez va tomando más fuerza", asegura Barbé. www.karenbarbe.com

Francisca Aldea / Reactivando la industria local

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Además de vender sus productos con despacho nacional e internacional en www.minka-inhouse.com, los productos están disponibles en la tienda online chilena Depto 51 y, para el resto del mundo, en el portal norteamericano de diseño fab.com.

Fue durante un viaje de trabajo a China en 2012, después de llevar varios años como diseñadora en el área de decoración de diferentes marcas de retail, cuando Francisca Aldea (28) tomó la decisión de crear Minka Inhouse-Handmade, su propia marca de productos de casa 100% hechos a mano con artesanos chilenos. Estaba cansada de ser un eslabón más de la producción en masa, de diseñar en base a productos que ya existían en el mercado, viajar a China en busca de proveedores, pagar sueldos bajos y después maximizar la venta a precios mucho más altos que los de producción. "Cuando me vi siendo parte del sistema que ha llevado a que en Chile los talleres de oficios artesanales cierren, decidí renunciar y embarcarme en un proyecto que incentivara la industria local", cuenta.

"Cuando me vi siendo parte del sistema, que ha llevado a que en Chile los talleres de oficios artesanales cierren, decidí renunciar y embarcarme en un proyecto que incentivara la industria local", cuenta Francisca Aldea, creadora de la tienda Minka InHouse-Handmade.

Al principio no fue fácil encontrar productores que se dedicaran al tejido, trabajo en madera o cerámica, materiales que le interesaban para desarrollar una nueva línea de productos textiles y de mesa. Y que, además, contaran con los estándares de calidad que buscaba para echar a andar el proyecto. Entonces se puso a preguntar en todas las tiendas de pasta de cerámica por buenos artesanos que trabajaran la técnica del vaciado y el pulido, y viajó a Valle Hermoso, cerca de La Ligua, para encontrar los mejores tejedores. A todos los incentivó a reactivar su trabajo. "Esto se trata de un aprendizaje mutuo, en el que yo les he ayudado con el diseño y ellos a mí con todo su conocimiento de los materiales y el oficio", resume Francisca. Por esto, parte fundamental del espíritu de su proyecto es visibilizar a los productores, que son protagonistas de videos y fotografías que sube a su página web y a las cuentas en redes sociales de la marca, que se vende en Chile  y en el mundo entero principalmente online. www.minka-inhouse.com

Ignacia Piriz / Textiles con marca propia

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Al llegar a la primera clase del curso de estampados que la diseñadora e ilustradora Ignacia Piriz (32) realizó el año pasado en Island School of Design –para muchos, la mejor escuela de diseño del mundo–, la primera orden del profesor fue apagar los computadores. Por algunos meses, para crear patrones, los alumnos debieron sacar papel y lápiz, dibujar y buscar inspiración en lo que los rodeaba. En la primera clase del curso de tejido que realizó después, en la misma universidad, la orden fue la misma. Y, a punta de ensayo y error, aprendió desde enhebrar una aguja hasta tejer telares a máquina, tal como se hacía en los años setenta antes de la era de la computación. Fanática del diseño aplicado y de poder llevar sus dibujos a diferentes superficies, fue en esa escuela donde se reencantó con trabajar usando sus propias manos, oficio que tenía inculcado desde chica impulsada por su mamá, la ceramista Trinidad Correa.

Inspirada en iconografía y flora y fauna chilena, la diseñadora ignacia piriz lleva a sus textiles diseños que ella misma dibuja a mano o teje en su máquina a telar.

De regreso a Chile, hace ocho meses que Ignacia creó María Prints, su propia marca de textiles y tejidos. Estudiosa de la iconografía chilena, en sus diseños incorpora desde flores silvestres hasta la versión de los animales en greda de Quinchamalí que pintó Nemesio Antúnez en su clásico mural de la galería comercial Juan Esteban Montero, en Huérfanos. En sus bolsos, mantas, sábanas y ropa de cama combina tradición con diseño moderno trabajando en conjunto con tejedores artesanales de las comunas de El Bosque, Pudahuel y Macul, quienes elaboran los productos a partir de muestras que Ignacia teje en su máquina de telar e imprime en serigrafía. La acogida ha sido un éxito y ahora acaba de arrendar un taller más grande en Vitacura para responder a la creciente demanda. Para este invierno, está trabajando en una colección inspirada en el sur de Chile con materiales nobles como alpaca y lana de oveja. "El valor por lo handmade ha creado un nuevo movimiento global en el que el valor de los productos también pasa porque dan a conocer parte de las raíces de diferentes países y culturas. En mis diseños, eso es clave", concluye. www.ignaciapiriz.cl / www.mariaprints.com

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