Vinos fríos a la mesa

Paula 1201. Sábado 4 de junio de 2016.

"El hielo siempre por fuera", es ley para los que saben de vino. Por mucho que se haya puesto de moda en algún momento, echarle un cubo de hielo a la copa del vino es un sacrilegio, aunque sea un blanco, un espumante, un rosé o un pinot noir: un vino con hielo es un vino aguado. Por eso, para olvidarse de cubetas, hieleras y coolers incómodos, los cobertores de botellas Skybar de Oster le caen como anillo al dedo a los vinos que exigen los 8 °C. La gracia es que están hechos de materiales aislantes (interior insulado) lo que mantiene la temperatura por horas, eliminando el clásico chorreo de agua y la humedad de la botella fría cuando se pone en contacto con el ambiente. Y en el invierno son perfectos para los tintos cuando se van a tomar al aire libre porque también mantienen los 20 °C que requieren. Hay tres formatos, uno para transportar botellas a paseos y picnic ($12.990), otro transparente cuya base tiene iluminación led, perfecto para ocasiones más elegantes ($19.990) y otro metálico para botellas más grandes ($14.990). www.oster.cl