Cordero valora diálogo en el Congreso por acuerdo de Nain-Retamal y dice que “quedan claras las reglas sobre las cuales deben actuar las policías”

Tras poco más de 10 horas de discusión el Senado aprobó la ley Nain-Retamal, proyecto que busca fortalecer la función de las policías en el país, y que ahora fue despachado a tercer trámite legislativo en la Cámara Baja.

Según explicó el ministro de Justicia, Luis Cordero, a Radio ADN, en principio al Ejecutivo le importaban “tres ideas claves”. Lo primero era “disponer de reglas claras para el funcionamiento de las policías, lo segundo tenía que ver con tratar de acotar o derechamente eliminar consideraciones que tenía el proyecto sobre apreciaciones subjetivas de las policías cuando usaban sus armas de fuego”.

Mientras que lo tercero tenía relación con “eliminar normas que, en nuestra opinión, habían excedido ciertos marcos porque estaban imponiendo en causal de percepción de responsabilidad del mando, o acotando los delitos de apremios ilegítimos, que tenía consecuencias insospechadas”.

“El Presidente nos había encomendado, y lo había señalado públicamente días atrás, que hay tres situaciones que van de la mano: seguridad, justicia y Derechos Humanos”, puntualizó.

De todas maneras, y tras su aprobación, Cordero aclaró que el Ejecutivo y oposición hicieron concesiones y llegaron a un acuerdo para poder despachar el proyecto. Según dijo, el gobierno finalmente debió dar su brazo a torcer con el Código de Justicia Militar y se terminó aceptando incluir el principio de legítima defensa en el Código Penal.

“El Ejecutivo cedió que estas regulaciones estuvieran en el Código Penal, a cambio de que las regulaciones quedaran ahí claramente establecidas y delimitadas, de principio a fin, asociadas a las actividades de las policías en materia de orden y seguridad pública”, explicó.

En tanto, la oposición “cedió en que las causales de legítima defensa estuvieran acotadas, que no tuvieran rangos de discrecionalidad y que la manera en que estuvieran acotadas es en aquellas hipótesis donde esté comprometida la vida integridad física del policía o la de un tercero”.

En esa línea, el jefe de la cartera aseguró que sobre el proyecto como tal “queda claro las reglas sobre las cuales los policías deben actuar o los marcos normativos sobre los cuales los policías deben actuar”. Y que “queda claro que el estatuto jurídico que se puede invocar por parte de las policías es uno solo y está regulado en un solo lugar. El problema de antes es que teníamos dos estatutos en lugares distintos”.

Sin embargo, Cordero puntualizó en que quedaron pendientes “las restricciones a la libertad condicional, la restricción a los pisos de las penas, y buena parte de esas normas las sostuvo el Ejecutivo y las perdió”.

El ministro de Justicia aclaró que “por parte del Ejecutivo, por ahora, y en estas condiciones, no hay una decisión para vetar el proyecto, pero hay que ver que sucede”.

Y manifestó tener la sensación de que “el gmbiente de la discusión publica sobre este proyecto cambió en estas horas. Lo relevante es que tanto el Gobierno como la oposición buscaron fórmulas de dialogo y conversación”.

“Estamos en un contexto de ánimo más auspicioso del que probablemente podíamos haber tenido atrás y me quedo con eso. Nunca había pensado en mi vida anterior llegar a una posición como esta, me deja con mucha tranquilidad”, finalizó.