Delgado se despliega para intentar contener crisis oficialista

Hasta el Congreso se trasladó ayer a primera hora el ministro Rodrigo Delgado para sostener un encuentro con los jefes de bancada de Chile Vamos.

En su primera ida a Valparaíso desde que asumió, el nuevo titular del Interior se desplegó con el objetivo de intentar aplacar la crisis al interior del oficialismo que se arrastra desde hace al menos tres semanas y que, por estos días, se ha ido recrudeciendo. Esto, sobre todo luego de la aprobación en la Cámara del segundo retiro del 10% del fondo de pensiones, iniciativa que contó con 48 votos de Chile Vamos.

Así, acompañado de sus pares de Hacienda, Ignacio Briones, y de la Segpres, Cristián Monckeberg -quienes han estado en el foco de las críticas y los conflictos-, intentó contener la crisis al reunirse con los representantes de las bancadas del bloque.

“El Presidente me ha pedido fortalecer la relación con las bancadas y poder transmitirles que va a haber una comunicación distinta”, dijo ayer Delgado.

En el encuentro, que fue calificado de “franco”, Delgado mostró una presentación y planteó una propuesta de coordinación, al igual como lo hizo el lunes con los timoneles de la coalición, y transmitió sus intenciones de trabajar en unidad. Esto, en un escenario en que en Palacio existe preocupación por la situación que atraviesa el comité político, el que reconocen se ha visto debilitado y desgastado a raíz del desempeño legislativo y el “fuego amigo”.

Ahí, de hecho, los partidos transmitieron sus reparos y que el problema central ha sido la coordinación, la falta de estrategia y terminar concediendo más protagonismo a los proyectos de la oposición que a los propios.

En ese sentido, los legisladores plantearon, según presentes, que debe evitarse la vorágine “populista” e intentar responder de manera oportuna a las demandas ciudadanas. Y también recalcaron la importancia de levantar una agenda propia.

De esta forma, los dirigentes de los partidos subrayaron que la oposición seguirá impulsando medidas que, a juicio de ellos, son inconstitucionales, como las del retiro de fondo de pensiones. Y advirtieron que ya se presentaron otras iniciativas legales de esa naturaleza en el Congreso. Por lo mismo, pidieron que La Moneda acuda al Tribunal Constitucional para dar una señal clara, y que no sean solo los partidos los que asuman los costos, sobre todo aquellos que -señalaron- han sido “leales” con el gobierno.

“Una cosa es pararlo a través de los votos y otra cosa es que el gobierno dé una señal y vaya al TC. Eso tiene que hacerlo”, dijo la diputada Karin Luck, quien participó del encuentro.

Briones y Monckeberg, de acuerdo a las mismas fuentes, transmitieron que están viendo qué es lo más conveniente y que sigue sobre la mesa la opción de acudir al TC durante la tramitación, después de que se despache el proyecto o simplemente no recurrir. De hecho, tras la cita, Delgado realizó un punto de prensa en el que señaló que “no hay nada descartado por ahora”.

En La Moneda reconocen que la decisión significa un dilema, ya que cualquiera sea la determinación que se tome traerá costos políticos. De igual manera, los secretarios de Estado transmitieron que continúan viendo la estrategia con la cual enfrentarán el proyecto en el Senado y que se mantiene la idea de amarrar un acuerdo en la reforma de pensiones.

Asimismo, los ministros calificaron de “injustas” las críticas de los legisladores oficialistas, quienes en los días previos dijeron que el gobierno no ha tenido ninguna propuesta concreta para enfrentar estos temas.

Como sea, ahora los partidos intentan bajar el perfil al conflicto, sobre todo en RN y la UDI, que no quieren debilitar más a sus respectivos ministros.

Luego de la cita con los jefes de bancada, Delgado se reunió por unos minutos con los diputados de RN, a quienes manifestó su disponibilidad y pidió trabajar de manera coordinada. Y se espera que la próxima semana almuerce con la bancada UDI.