Elizalde y Ebensperger renuncian a la mesa del Senado: este miércoles se elige a nueva directiva

Este martes la mesa del Senado liderada por Álvaro Elizalde (PS) y Luz Ebensperger (UDI) presentaron su renuncia al cargo.

El hecho se da en el marco del acuerdo de gobernabilidad alcanzado el año pasado por el Socialismo Democrático, Apruebo Dignidad, la DC, la UDI y Evópoli.

Dicho pacto establece que para el 2023 le corresponde al gremialismo presidir la corporación, para lo cual estarán representados por el senador Juan Antonio Coloma, mientras que la vicepresidencia quedará en manos de la DC con Francisco Huenchumilla.

Es así como este miércoles 15 la Cámara Alta deberá votar la nueva mesa directiva para lo cual quienes postulen deben obtener el respaldo de la mitad del Senado (25 votos).

En las semanas previas hubo dudas respecto a si Apruebo Dignidad apoyaría a Coloma para la mesa; sin embargo sus dirigentes dejaron en claro que respetarían el acuerdo administrativo que se llegó entre los partidos.

Al respecto, la titular de la Segpres, Ana Lya Uriarte dijo que los integrantes de la saliente mesa “han dado muestra de una ecuanimidad y de un actuar en relación a ese mandato, republicano, mandato democrático que dice que respecto de una Corporación como esta que esta integrada por diversos parlamentarios y parlamentarias con diversas ideologías y visiones políticas han sido ustedes capaces de ponerse por sobre de ella y actuar en beneficio de la Corporación”.

“Agradecemos la colaboración que han tenido con el Ejecutivo siempre en vistas al bien común, el bien general más allá de la política partidista y más allá de lo adversarial que en ocasiones resulta el ejercicio de tal actividad en esta Corporación”, cerró.

En su discurso final de despedida, el senador Elizalde hizo un balance de su gestión y abordó diversos hitos de su periodo.

“Asumir la presidencia hace poco más de 12 meses cuando Chile se encontraba inmerso en el primer proceso constituyente, cuyas bases se sentaron en un histórico acuerdo suscrito en noviembre de 2019 en la sala de lectura del Senado en Santiago, como forma de dar una salida democrática e institucional a una crisis de dimensiones históricas expresadas en el estallido de octubre”, comenzó diciendo Elizalde.

El parlamentario socialista indicó que “hace tan solo 12 meses había quienes entusiastamente proponían el cierre de nuestra institución, poniendo fin a una tradición más antigua que nuestra República. Se repetían constantemente críticas al sentido de esta Cámara. Algunas de ellas eran expresión de las legítimas y fundadas desconfianzas que existen en amplio sectores de la sociedad chilena respecto del funcionamiento de nuestro sistema político. Otras, sin embargo, eran simplemente manifestaciones de ignorancia y desconocimiento de nuestro trabajo y del rol del Senado en la vida republicana”.

“Nadie sospechaba entonces que el Senado volvería a jugar un rol tan crucial para mantener el esfuerzo patriótico y democrático de avanzar hacia una nueva constitución como factor de unidad que genere condiciones para una estabilidad y paz social en el largo plazo en el marco del acuerdo por Chile suscrito por una gama amplia de fuerzas políticas con representación parlamentaria tras meses de un fructífero diálogo coordinado por las meses de ambas cámara del Congreso Nacional”, agregó.

Elizalde enfatizó que “cuando la estridencia y las descalificaciones se han transformado en una constante en nuestro país, el Senado mantuvo siempre en su carácter de espacio de tolerancia y respeto, pese a nuestras legítimas y profunda diferencias”.

El ahora expresidente del Senado advirtió que “las chilenas y chilenos están agobiados ante la falta de certeza, la falta de certidumbre, debemos hacernos cargo a las angustias cotidianas de las personas, su temor a perder el trabajo, los problemas en el transporte público, su miedo a ser asaltados, la indignación ante las pensiones bajas o el alto costo de los medicamentos. La política tiene real sentido cuando se hace cargo de dar respuesta y solución a todos estos problemas”.

“Para ello resulta imprescindible una labor legislativa acuciosa y expedita como resultado de un debate ideas que nos permita avanzar en proyectos a la altura de las demandas ciudadanas”, cerró.