Gestos a Venezuela, Cuba y Ucrania y foco en derechos humanos: los ejes del segundo discurso de Boric en la ONU

A las 17.50 los asientos se fueron ocupando a medida que avanzaba el discurso del Presidente Gabriel Boric. En contraste con su debut en la ONU hace un año, en donde se enfocó en la política interior chilena, este miércoles en la 78° Asamblea General el Mandatario centró su discurso en materia de derechos humanos y política exterior.

En total, fueron cinco los conflictos internacionales citados por Boric y siete los países mencionados. El Mandatario adelantó en la antesala de su viaje -este martes despegó a las 17.00 su avión y llegó a las 6.30 de este miércoles a Nueva York- que su discurso recogería “que nuestro país es una democracia sólida, con instituciones robustas. Sus expresidentes vivos, conmigo como Presidente en ejercicio, nos comprometimos en un documento histórico, de siempre valorar la democracia. Los problemas de la democracia se resuelven con más democracia y nunca con menos. Los derechos humanos son irrenunciables y deben defenderse ante todo evento y en todo lugar”.

Y así fue. Luego de hablar sobre la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado de 1973 -al igual que en 2022 aludió al exmandatario de la Unidad Popular, Salvador Allende-, se refirió en duros términos al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo. El líder nicaragüense había cuestionado a Boric en la antesala de la Asamblea General de la ONU, tildándolo de “Pinochetito” por defender a Carabineros, mientras que el Jefe de Estado chileno mandató al canciller Alberto Van Klaveren a presentar una nota de protesta al representante de ese país.

“Me siento en el deber de denunciar ante esta asamblea y el mundo la persecución que hoy vive todo quien piensa distinto del gobierno del régimen dictatorial del señor Ortega y Murillo en Nicaragua”, afirmó.

Luego, fueron las sanciones que ha aplicado Estados Unidos en contra de Venezuela y Cuba. El gesto se vio como un espaldarazo a los gobiernos de Nicolás Maduro y Miguel Díaz-Canel, respectivamente, abiertamente cuestionados por la oposición y defendidos por el ala más dura de Apruebo Dignidad, la coalición base de Boric. “Cuando se imponen sanciones de manera unilateral no se está aportando a la solución (...). Es imperativo que EE.UU. levante las sanciones contra Venezuela”, dijo el Presidente Boric.

También se refirió al conflicto entre Israel y Palestina y, por último, a la guerra entre Rusia y Ucrania. La previa del discurso del Presidente chileno estuvo marcada por la reunión bilateral que sostuvo con su homólogo del país europeo, Volodímir Zelenski. Fue este último, quien se ha convertido en el rostro de esta edición de la Asamblea General, quien solicitó el encuentro y quien también invitó a Boric a visitar su país, en una fecha aún por definir.

Es por ello que se generó expectativas respecto de lo que diría el Jefe de Estado sobre la guerra entre los dos países europeos, que estalló en 2022. Así, el Mandatario planteó que “no podemos sino condenar de manera clara y explícita la ilegal invasión de Rusia a Ucrania (...). No se puede responsabilizar de la misma manera al gobierno invasor que al pueblo invadido”.

Además de aludir a la conmemoración de los 50 años del Golpe que realizó La Moneda hace diez días, el Presidente Boric también se refirió a otras materias internas, aunque no con la dedicación que plasmó en su debut ante la ONU.

Así, no hizo mención al proceso constitucional que hoy encabeza el Partido Republicano, como sí lo hizo en 2022 para explicar la victoria del Rechazo en la plebiscitada propuesta de Carta Magna de la Convención. Sí le hizo un guiño a Chile Vamos, sector de la derecha con el cual ha podido llegar a algunos acuerdos, por ejemplo, para sacar adelante la reforma que habilitaba el nuevo proceso constituyente, hoy en curso o la agenda de seguridad.

“Incluso en los momentos de más algidez política somos capaces, oficialismo y oposición, de juntarnos para buscar caminos que nos permitan salir de los entrampamientos y poner a nuestro pueblo por delante de nuestras legítimas diferencias. En conjunto, oficialismo y oposición vamos armando camino para atender las demandas de nuestro pueblo”, afirmó.

“En Chile existen grandes diferencias, pero también grandes consensos”, dijo luego de citar la firma del Compromiso de Santiago que acordaron todos los expresidentes vivos, incluyendo a Sebastián Piñera.

Boric también planteó lo que considera tres “tareas urgentes”. En primer lugar, “cuidar la democracia, debemos detener el avance de la intolerancia y los autoritarismos. Enfrentar decididamente la desinformación que corroe a la democracia, de forma institucional y sin complejos”. En ese momento, también defendió los derechos de las mujeres, “cuyos avances se ven amenazados por sectarismos y fanatismos de diferente tipo”.

El Presidente habló sobre la crisis del cambio climático, un tema eje en esta 78° Asamblea General de la ONU. En esa ocasión, hizo un llamado a “acelerar la transición energética, modificar nuestros patrones de consumo y a establecer nuevas reglas e instituciones que permitan corresponder a estas exigencias (...). Quiero hacer un llamado responsablemente a los países con mayor actividad industrial a que asuman una ética de la responsabilidad”. Al mismo tiempo ratificó la candidatura de Valparaíso para que esta ciudad sea sede de la secretaría técnica del tratado de Conservación y Uso Sostenible de Biodiversidad Marina (BBJN), en donde se competirá con Bélgica.

Finalmente, se refirió al cambio tecnológico, punto en donde destacó el proyecto Congreso Futuro, fundado por el exsenador Guido Girardi.