Los lazos que facilitan la articulación del PC y el FA

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La diputada RD Maite Orsini junto a su par del PC Camila Vallejo.

La relación de amistad entre las figuras de la colectividad y el bloque, además del factor generacional, han posibilitado la coordinación.


Sólo días después de realizadas las elecciones parlamentarias comenzaron los contactos entre el Partido Comunista y el Frente Amplio. Si bien en un principio eran conversaciones entre dirigentes que tenían una relación personal, con las semanas los acercamientos comenzaron a ser formales.

De hecho, desde el PC se mandató a un grupo de militantes a iniciar conversaciones con distintos movimientos y partidos del Frente Amplio proponiendo, entre otras cosas, una articulación territorial y electoral en el largo plazo. Esto, con miras a un eventual acuerdo electoral tras un análisis negativo de lo que serían las elecciones municipales sin una oposición articulada.

Así, para antes del cambio de mando, los comunistas ya se habían reunido con el Partido Humanista, Izquierda Libertaria, Revolución Democrática, Movimiento Autonomista, Izquierda Autónoma y Poder Ciudadano.

Según sostienen desde ambos sectores, las cercanías personales entre distintos dirigentes han facilitado aún más el trabajo conjunto. A esto se suma que de los diputados del Frente Amplio, cuatro fueron militantes del PC: Catalina Pérez hasta 2011, Pamela Jiles hasta 2006, Natalia Castillo hasta 2003 y Gael Yeomans mientras cursaba enseñanza media. Las cuatro militaron con distintos dirigentes comunistas que hoy siguen activos. Yeomans, por ejemplo, tiene cercanía con Camilo Sánchez, actual presidente de las JJ.CC., a quien conoció a los 15 años.

Tomás Hirsch, en tanto, si bien siempre ha sido militante humanista, fue el candidato presidencial en 2005 de Juntos Podemos, conglomerado del que era parte el PC, quienes se cuadraron con él.

También, el factor generacional de los legisladores del Frente Amplio es algo que desde ambos sectores reconocen como importante. Es por esto que son varios los diputados que tienen vínculos de amistad con parlamentarios o miembros de sus equipos.

Maite Orsini (RD) mantiene lazos de amistad con Camila Vallejo (PC), quien, a su vez, compartió durante sus años como dirigente estudiantil con Giorgio Jackson (RD) y Gabriel Boric (MA). El comunista Daniel Núñez, en tanto, es muy cercano a Pablo Paredes, jefe de gabinete de Orsini y ex militante de la Jota.

Un caso parecido es el del RD Renato Garín, quien en la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile conoció al jefe de gabinete de Vallejo, Leonardo Vilches, y al abogado del equipo de Karol Cariola, Yuri Vásquez, con los que mantiene cercanía hasta la fecha.

Por otro lado, ya comenzaron a iniciarse los trabajos en los distritos y, tal como se acordó, se convirtió en algo usual ver a los diputados comunistas y frenteamplistas impulsando de manera conjunta distintas iniciativas.

El viernes 16 de marzo, los diputados PC Camila Vallejo y Amaro Labra, junto con sus pares del Frente Amplio Pamela Jiles (PH) y Miguel Crispi (RD), solicitaron al Consejo de Defensa del Estado hacerse parte de la investigación por posibles delitos relacionados al uso de fondos públicos en la Municipalidad de La Florida. A esta iniciativa se sumó también la RN Ximena Ossandón.

Días después, Crispi con Cariola realizaron un punto de prensa en común para referirse a la modificación realizada por el Ministerio de Salud al protocolo de la ley de aborto en tres causales. Además, ambos presentaron en Contraloría, días después, un requerimiento contra el mismo protocolo. A esta última iniciativa se sumaron Vallejo y Orsini.

Un día después, Carmen Hertz (PC) y Pablo Vidal se refirieron juntos a la convocatoria para el acto de conmemoración a las víctimas del caso degollados. Los diputados, además, son miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara y participaron de la segunda reunión de La Moneda para ver los alegatos de la Haya.

Además, ambos sectores han realizado juntos distintos puntos de prensa en el Congreso, para referirse a temas como la comisión investigadora por Operación Huracán y el proyecto de cannabis medicinal.

Y es que en las colectividades aseguran que la agenda que ha levantado Piñera -corrigiendo, por ejemplo, el protocolo para la ley de aborto- ha ayudado precisamente a instalar propósitos comunes entre parlamentarios del FA y del PC.

Un escenario que se ha visto reforzado, además, por el fin de la Nueva Mayoría, conglomerado en el que los comunistas convivieron por cuatro años con otras fuerzas políticas.

Con todo, tanto el PC como el Frente Amplio descartan que exista una estrategia tras las acciones conjuntas, pero aseguran que ha quedado en evidencia la sintonía programática que tienen.

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